La empresa, dirigida por el mexicano Enrique González, desarrolla un proceso para aprovechar las partes más nutritivas de las frutas que normalmente se desperdician, como cáscaras y semillas, y las convierten en ingredientes para la industria de alimentos procesados.
“Somos apasionados del problema de obesidad, en mi infancia fui un niño obeso y cuanto tenía 15 padecí pre-diabetes, desde ese momento tuve que saber exactamente qué alimentos consumía y que ingredientes tenían para evitar caer en ser diabético”, señaló González.
Agregó que la empresa ha logrado reducir 40 por ciento de uso de huevo y grasas en la industria de panificación sin cambiar ni el sabor, ni el olor y mejorando la textura, sabor y tiempo de vida en el anaquel.
“Con esto el productor se puede ahorrar de un cinco por ciento a 12 por ciento en costos de producción mejorando la calidad de sus productos. Logramos hacer que se ofrezcan mejores alimentos”, señaló.
Las 16 “startups” seleccionadas entre 200 de 22 países de la región, participarán en el evento Idear Soluciones Para Mejorar Vidas, que se realizará el 2 de diciembre en la sede del BID en Washington.
El foro tiene como objetivo reunir las mentes más creativas que ofrecen soluciones innovadoras a retos del desarrollo alrededor del mundo.
La lista incluye a Acamica (Argentina); Handtalk, Livox, Énois Inteligência Jovem y Plataforma Saúde (Brasil); RetiDiag y Copper BioHealth (Chile); Acuacare y Soko Text (Colombia); Digital Partners (Guatemala); Criptext (Panamá) y DUHEM, (Perú).
Igualmente están IEETECH Ltda y ViperMed (Uruguay), así como Take a Hand (Venezuela).
Un fundador o fundadora de cada empresa seleccionada viajará a Washington para participar en el foro, presentar sus empresas ante potenciales inversionistas y trabajar con especialistas en innovación, creatividad y mercadotecnia, señaló el BID.
El proceso de selección de las empresas que respondieron a la convocatoria del BID se realizó a través del apoyo de jurados especialistas en emprendimiento, innovación y financiamiento grupal.
Los jueces evaluaron los productos y servicios de las empresas que operan en áreas como cambio social, cambio climático, salud y bienestar, educación y conocimiento abierto, gobierno y participación ciudadana, y acceso a servicios financieros a través de tecnología.
