El sector empresarial encendió los focos amarillos ante la debilidad y rezago que enfrenta el mercado mexicano, panorama que se complica con la caída de los precios del petróleo y el tipo de cambio depreciado. Esto, dijo, obligan a modificar a la baja la expectativa de crecimiento de la economía mexicana de 3.5% a 2.1% para el 2015.
Rodrigo Alpízar, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) se quejó por el incremento de 15% en los precios en los insumos de importación a causa del tipo de cambio, aunque reconoció que algunas empresas se han visto beneficiadas por la paridad cambiaria.
“Un tipo de cambio a este nivel sí pone ya una presión inflacionaria y pone en riesgo la operación de empresas que tienen contratos ya asignados y firmados en firme de proveeduría al gobierno y si esto también pudiera llegar a requerir en algunos casos que exista un mecanismo para ajustar los contratos que tienen una alta integración de insumos en dólares”, comentó en conferencia de prensa.
Otro de los problemas que enfrenta el sector industrial –dijo el líder industrial- son las deudas que mantienen los estados y municipios a través de las compras de gobierno, que a la fecha la cifra asciende a los 100,000 millones de pesos, lo cual es una de las situaciones que evita la recuperación del mercado interno.
En entrevista por separado, Patrick Devlyn, vicepresidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) mencionó que la incertidumbre del peso débil se prolongará hasta mediados de año, de modo que urge echarse andar las reformas estructurales entre ellas la fiscal, pero una integral, porque México está perdiendo oportunidades de crecimiento.
Para el sector empresarial, lo preocupante en este momento, destacó, es el tipo de cambio, la reforma fiscal y cómo se hace un mejor gasto en los distintos elementos sociales e inversiones.
“Para efectos de crear un mercado más formal hay una gran cantidad de tareas por hacer, creo que en el gobierno hay un mayor enfoque de como realmente hacer que las empresas que ya pagan paguen más, cuando debiéramos estar buscando un mayor ímpetu el que más actores de la sociedad en los distintos sectores estén participando en una economía formal y no está en el mismo nivel de prioridad y se debe de elevar”, acotó el empresario de las ópticas Devlyn.
