Al presentar su análisis “Diario de mercados emergentes globales”, el economista en Jefe para México del organismo, Carlos Capistrán, aseguró que, a diferencia de China, la economía mexicana cuenta más ventajas competitivas para el sector manufacturero como su localización geográfica y un amplio lazo comercial con otros países.
Además de que tiene una estrecha relación con Estados Unidos, a pesar de los riesgos macroeconómicos que actualmente rodean a la economía mexicana, lo que le da fortaleza para seguir siendo competitivo, aun cuando China devalúe con mayor fuerza su moneda.
“México tiene ventajas importantes frente a China, una de ellas es la localización geográfica y menores salarios en dólares. Si bien una depreciación del yuan afectaría a ambas, afectaría menos de lo que cree el mercado”, dijo.
Otro factor es que en los últimos cuatro años, China ha incrementado su participación de importaciones a Estados Unidos con un ritmo ligeramente superior a lo que lo ha hecho México. De acuerdo con el estudio de BofA, de 2011 a 2015, China incrementó sus importaciones a Estados Unidos al pasar de 18.1 a 21.5 por ciento; mientras que México las elevó de 11.9 a 13.2 por ciento.
Asimismo, el analista resaltó que tener un tipo de cambio flotante y flexible, le hace a México tener una importante defensa, pues actúa como amortiguador ante los choques externos.
En este sentido, aclaró que es gracias a un tipo de cambio flexible, que México cuenta actualmente con una inflación baja, que no refleja un contagio negativo del alza del dólar en los precios a los consumidores.
Por otro lado, mencionó que los beneficios de las reformas estructurales, como la reducción en los precios de energéticos y telecomunicaciones, le representan a las empresas menores costos, hecho que las hace más competitivas hacia el exterior.
Por separado, el presidente de Scotiabank, Brian Porter, refrendó su confianza en la economía mexicana y afirmó que no se espera ninguna “calamidad económica” a nivel mundial.
“No estamos pronosticando una calamidad económica. Hay cierta desconexión entre los mercados y la economía real. Nuestro negocio aquí va bastante bien. Los mercados se están ajustando, pero continuamos invirtiendo en nuestro negocio en México”, dijo.
Para el caso de México, se mostró optimista debido a las ventajas que ofrecen las reformas estructurales y su estado de cuenta fiscal, ambos elementos, dijo, crean confianza al exterior para motivar las inversiones, y a su vez, el crecimiento económico.
En tanto, el director mundial de Banca de Scotiabank, Dieter Jentsch, señaló que los mercados confían en México, por la estabilidad macroeconómica con la que cuenta desde el año pasado y debido a que Agustín Carstens se mantiene al frente del Banco de México (Banxico).
El directivo aplaudió la labor que ha hecho Carstens al frente del banco central mexicano, pues mantiene una política monetaria acorde a la situación económica mundial, además de que ha sabido controlar la inflación, misma que cerró el 2015 en 2.13 por ciento, su nivel más bajo desde que se comenzó a medir este indicador.
