Se ubicó a Veracruz en el décimo lugar del mundo entre los sitios más atractivos para la práctica del buceo recreativo y explican que el INAH tiene documentados unos 500 galeones hundidos frente a costas veracruzanas.
Refieren pecios históricos como el bergantín “Sommers”, que se fue a pique en 1846, o el vapor “Hidalgo”, hundido cerca de Isla Verde, o el “Ana Elena”, cuyos restos reposan en el arrecife de la Anegada de Afuera.
O el caso del cañonero C-50 Rivapalacio, un buque de la Armada de México hundido ex profeso para convertirlo en arrecife artificial.
Esos sitios, cita el diario en el artículo, facilitan el buceo manera segura y de paso reducen el tránsito de submarinistas por sus delicados arrecifes naturales, que son auténticos jardines submarinos con una riquísima fauna y declarados Área Natural Protegida.