La constructora mexicana ICA en conjunto con la empresa Meco de Costa Rica y FCC de España, presentó la propuesta más baja con 267.8 millones de dólares (mdd) para competir por la licitación de la última fase de ampliación del Canal de Panamá, denominada Pacific Access Channel, que tiene como finalidad el paso de buques de mayor tamaño y que podría adjudicarse en los próximos días.
De acuerdo con la licitación publicada por la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) el pasado 30 de julio y luego de haber sido pospuesta la presentación de propuestas que inicialmente se llevaría a cabo el 30 de octubre, el día de ayer el conglomerado al que forma parte la mexicana ICA presentó la propuesta más baja compitiendo contra las constructoras Norberto Odebrecht, que ofreció 379.8 mdd; JV Jan de Nul con 359.1 mdd y Consorcio ISC Panamá con una propuesta de 294.9 mdd.
Según la licitación registrada con el número 94278 por la ACP, los trabajos consisten en la construcción del Cauce de Acceso del Pacífico Fase 4, el cual contempla la excavación, remoción y disposición de aproximadamente 27 millones de metros cúbicos de material sin clasificar, la instalación de una estructura de contención de ataguías celulares y la construcción especializada de una presa de roca con un núcleo de arcilla impermeable.
Asimismo, contempla la construcción de vías de acceso y canales de desviación de drenaje de agua, la creación de sitios de depósito y la limpieza de polígonos de tiro, así como la instalación de sistemas de desagüe para la remoción de agua superficial y subterránea y la administración e implementación de controles ambientales, entre otros trabajos.
Cabe destacar que en el proyecto de ampliación del Canal de Panamá también se contó con la participación de la empresa CILSA Minera María, en la que Grupo Carso de Carlos Slim tiene invertido capital y a la cual la ACP comenzó a penalizar en octubre con 10 mil dólares diarios de retraso en las obras, al no concluir a tiempo los trabajos pactados.
La ampliación total está estimada en cinco mil 250 millones de dólares, que serán pagados con ingresos generados por el pago de peaje de barcos por la ruta.
