contribución a la formación de marinos
mercantes es inexistente.
La eficiencia de los puertos Mexicanos
se incrementó substancialmente a raíz
de los cambios estructurales acaecidos
en 1993. Mientras que hay que
reconocer dicha evolución, todavía hoy
en día adolecemos de prácticas
comparables con otros países, sobre
todo, en la conectividad con otros
medios de transporte, algo que afecta de
forma substancial a la operación
intermodal.
Es por lo tanto condición necesaria para un país
tener un comercio exterior sólido y abundante si se
quieren alcanzar cuotas de bienestar cada vez
mayores. El comercio exterior depende de muchos
factores y variables, y para su análisis y
comprensión se necesitarían muchas más páginas
de las que aquí disponemos. Pero sin lugar a
dudas, un factor incuestionable es la actividad
marítimo portuaria de una nación, así como su
complemento y conexión con otros modos de
transporte.
El estudio y comprensión de esta actividad en
México, y su comparativa con otros países, no sólo
limítrofes, es el primer paso para tomar las
decisiones adecuadas para favorecer su
desarrollo.
El análisis comparado muestra
que la participación de nuestro país en la
actividad marítima es muy baja, y se
centra básicamente en el tráfico
portuario, mientras que otras como el
seguro marítimo, construcción naval o
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