El Intendente de Valparaíso, Gabriel Aldoney, ratificó que la determinación que se tome en cuanto a si el puerto a Gran Escala se desarrolle en Valparaíso o en San Antonio “en términos jurídicos legales, no significa que la otra parte no sea considerada o esté eliminada como tal”. La idea la expresó tras su participación en la Expo Logística & Comercio Exterior realizada en Viña del Mar.
En la ocasión explicó además que, en el largo plazo, lo más probable es que las ofertas de ambos puertos se tiendan a equilibrar, dado que en Chile “no hay muchos lugares aptos para disponer de un desarrollo portuario”, aunque reconoció que al parecer en Valparaíso “no hay un consenso suficiente en algunos sectores de la población respecto al desarrollo portuario y eso obviamente juega en contra de una actividad tan importante”.
En todo caso, la autoridad cuestionó que la población de Valparaíso en su mayoría sea la que efectivamente se oponga al desarrollo portuario: “Estoy convencido que el porteño común y corriente valora enormemente la actividad portuaria por los efectos que tiene no sólo en la economía, sino porque Valparaíso, su tradición, es haber sido primero un puerto y después una ciudad”.
En este plano recordó que “la actividad portuaria llegó a tener en algún momento 15.000 puestos directos de empleo”. Al respecto, manifestó: “Le aseguro que en los cerros de Valparaíso no hay familia no haya estado vinculada al puerto en algún momento de su historia”.
Sostuvo además que “Creo que no hemos sido lo suficientemente capaces para conciliar los dos criterios. No se trata de construir puertos para destruir el valor patrimonial y no se trata de valorar la potencialidad patrimonial para destruir el puerto. Sino que ambas cosas se potencien como ocurre en otros lugares”, reflexionó.
Un giro a la discusión
Por otra parte, Gabriel Aldoney, manifestó que “en el ámbito portuario la valorización que pueda tener un puerto u otro son decisiones, finalmente, de privados, “porque puede que un privado valore más que Valparaíso es más ciudad que San Antonio, que tiene más servicios, un sistema bancario o un servicio aduanero más consolidado etc…”, pero “también puede ser al revés: que San Antonio tiene espacios más amplios que Valparaíso y eso puede ser más relevante para un inversionista”, señaló.
Sin embargo, el intendente se mostró proclive a cambiar el giro de la discusión acerca de si el PGE se instalará en una u otra ciudad: “Lo más importante en esta materia, es definir el momento en el cual hacer las inversiones, porque hay que tener presente la actual contracción de la economía mundial, que hace que, evidentemente, el comercio exterior sufra del punto de vista de los flujos de carga”.
En la misma línea explicó que el crecimiento de las importaciones ha bajado y el de las exportaciones se han detenido, especialmente en cuanto a carga minera que era la que estaba impulsando el comercio exterior.
Añadió en este contexto que “las proyecciones que en algún momento hicimos fue cuando estábamos creciendo a una velocidad del 4 y el 5% -históricamente nosotros hemos crecido en un 5% anual- pero eso se ha detenido, por eso se debe determinar bien cuándo hay que hacer esto”. Es por ello- indicó- que uno de los temas que el Ministerio de Transporte ha estado trabajando se refiere a la realización de un estudio de demanda más detallado.
Sincerar el debate
Respecto a algunos argumentos esgrimidos en favor de apurar la toma de decisiones para definir el emplazamiento del PGE, Gabriel Aldoney afirmó que “muchas personas dicen que van a llegar buques de 15.000 TEUs, algunos añoran que lleguen buques de 20.000 TEUs y otros han planteado el tema del Canal de Panamá como el gran desafío”.
Sin embargo, la autoridad desechó tales argumentos señalando que “la carga (de Chile) que pasa por el Canal de Panamá fundamentalmente es de graneles, no es contenerizada”, y precisó que esta última, “particularmente, por el efecto de las importaciones, proviene de China y no pasa por el Canal”.
“Entonces creo que debemos sincerar el debate. Hacer una inversión en un momento no óptimo es mal utilizar los recursos, y esa es la discusión que tenemos que hacer y dejarnos de esta cosa pequeña, quien gana primero y quien va después. En el fondo esta es una inversión que se hace no sólo en el beneficio de la región de Valparaíso, sino del país y creo que cometer el error que algunos países han cometido de tener infraestructura inapropiada debido a sus dimensiones, no tenemos para qué hacerlo”, afirmó.
En esa línea consideró que “si el Terminal 2 se construye, si Puerto Central en San Antonio comienza a tener un ritmo adecuado de crecimiento, más los otros dos terminales que son STI y TPS, tenemos una brecha de tiempo para pensar bien este asunto”.