Realizar un presupuesto, así como un balance de ingresos y gastos, permite tener finanzas saludables y con ello un buen historial crediticio con el que instituciones pueden decidir si el usuario es o no candidato para un préstamo.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa (Condusef), el historial crediticio, también conocido como Buró de Crédito o Círculo de Crédito, es donde se concentra la información de aquellas personas que hayan tenido, o que tengan actualmente algún crédito.
Dicha información es solicitada por bancos, establecimientos comerciales, tiendas departamentales, compañías telefónicas y empresas automotrices, con el objetivo de evaluar y saber el comportamiento antes de otorgar un crédito.
Por ello, la comisión recomienda llevar unas finanzas saludables, para lo cual es necesario realizar un presupuesto y un balance de ingresos y gastos, así como usar con responsabilidad un crédito.
Advierte, que la manera de realizar los pagos es determinante para la clasificación del historial, debido a que el 81.3 por ciento de la población paga intereses al contar con una tarjeta de crédito, mientras que lo es mejor pagar mes con mes.
En ese contexto, la Condusef aconseja domiciliar los pagos de servicios a la tarjeta para empezar a generar un buen historial, ya que establecer una buena clasificación desde un principio, ayuda a obtener algún otro préstamo en un futuro.
En el caso de los que dejan de pagar, lo mejor es cubrir la deuda adquirida, para lo cual se puede llegar a un acuerdo con la institución para reestructurar la deuda u omitir una quita, y así evitar que no se vuelva a autorizar un préstamo hasta por seis años.
La Condusef explica, que al pagar la deuda o retraso, el historial se actualizará y le tomará a la institución financiera informar sobre cambio de calificación hasta 10 días; dicho comportamiento se conserva hasta por 72 meses y solo se cambia la calificación.