Mientras que otros ejecutivos de alto rango de GM respaldaron los planes de la compañía de seguir construyendo camionetas pick-up para México.
Esto lo dieron a conocer durante el lanzamiento de la nueva Chevrolet Silverado en el Auto Show de Detroit 2018, “tenemos un especial interés de que el TLCAN sobreviva entre Canadá, Estados Unidos y México, porque la industria está muy entrelazada y desde México se producen muchos empleos para el resto de los dos países”, dijo Mary Barra.
Respecto a su estrategia para las plantas que se encuentran en territorio mexicano, la CEO de GM comentó que bajo cualquier esquema será incorporado a la estrategia de Norteamérica, aunque no dio más detalles.
General Motors espera que sus pickups Chevrolet Silverado y GMC Sierra de próxima generación sean significativamente más rentables que el modelo actual, lo que les proporcionaría las ganancias necesarias que ayudarían a financiar sus inversiones de 1,000 millones de dólares (mdd) al año en nuevas tecnologías de movilidad, como vehículos eléctricos y autónomos, dejando miles de millones de dólares más para los accionistas.
GM pronostica informar un tercer año de ganancias récord con 2017.
“GM tuvo un muy buen 2017, continuamos transformando nuestra compañía para estar más enfocados, ser más resistentes y rentables”, dijo la presidenta y directora general de GM, Mary Barra. “Estamos posicionados para otro año fuerte en 2018 y uno aún mejor en 2019”.
Tan solo el año pasado, la planta de ensamble GM en Silao, Guanajuato produjo más de 400 mil camionetas en el pasado año 2017 y es pilar del lanzamiento de la nueva generación de Chevrolet Silverado. En caso de que Estados Unidos salga del TCLAN, las camionetas construidas en la planta de Silao, Guanajuato y enviadas al país norteamericano podrían pagar un arancel del 25 por ciento.
En días recientes, GM inauguró una línea de producción para una nueva transmisión de 10 velocidades en Silao, en el centro de México, y a fines del año pasado empezó a contratar 600 nuevos empleados, dijeron fuentes, reafirmando su apuesta por una de las categorías de producción en el exterior más lucrativas para las automotrices estadounidenses.
Personas familiarizadas con los planes de GM dijeron que la compañía cambiará la producción de un pequeño número de camionetas de trabajo pesado de la próxima generación de Silverado y Sierra a una planta en Flint en Michigan.
La presidenta ejecutiva de GM, Mary Barra, no respondió directamente cuando se le preguntó si la compañía está considerando terminar la producción de camionetas en México. “Vamos a seguir trabajando constructivamente para modernizar el TLCAN”, dijo.
El jefe de compras globales de GM, Steve Kiefer, dijo a Reuters que los proveedores del programa de camionetas también han realizado inversiones considerando la producción que cruza la frontera entre Estados Unidos y México. “La capacidad instalada es tal que sería prohibitivo hacer grandes cambios”, dijo.
Mark Reuss, el jefe de desarrollo de producto de GM, dijo que la empresa está usando sus plantas existentes en Norteamérica, pero no dio detalles cuando se le preguntó si GM podría dejar de ensamblar camionetas en México.
“No estoy seguro de que le digamos eso a nadie”, dijo Reuss. “No creo que vayamos a hablar sobre nuestra huella en el futuro”.
En otro intercambio con reporteros, Reuss dijo que GM buscaba usar sus fábricas en Norteamérica, incluyendo las de México.
Barra dijo que era optimista sobre el TLCAN, del que el presidente estadounidense Donald Trump amenazó con abandonar a menos de que se hagan grandes cambios en las negociaciones con México y Canadá.
El presidente de GM para Norteamérica, Alan Batey, dijo que la planta mexicana sostiene trabajos en Estados Unidos, “la camioneta que fabricamos en México, los motores vienen de Estados Unidos. Todo está interconectado”, aseguró.
General Motors cuenta con cuatro plantas de manufactura en México, una de ellas se encuentra en Ramos Arizpe, Coahuila; otra en San Luis Potosí, otra en Silao, Guanajuato, donde producen pickups como la nueva Chevrolet Silverado 2019, y la de Toluca, Estado de México.