CIUDAD DE MÉXICO, 21 de octubre de 2018.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), a través de la Subprocuraduría de Inspección Industrial, opera el Programa de Inspección Ambiental en Puertos, Aeropuertos y Fronteras de PROFEPA desde 1996 con resultados tangibles verificando el cumplimiento de las disposiciones legales nacionales y los convenios internacionales signados por México en materia ambiental y comercial.
Señala un comunicado que entre ellos se encuentran la Convención sobre Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), la Convención sobre Diversidad Biológica (CDB), la Convención Internacional de Protección de las Plantas (ICPP), la Convención de Rotterdam, la Convención de Estocolmo y la Convención de Basilea, los cuales dan el marco para la cooperación internacional en materia de conservación, aprovechamiento y protección de los recursos naturales y permiten un correcto manejo de las sustancias, materiales y residuos peligrosos.
De este modo también ha participado como parte de los equipos de apoyo técnico en materia ambiental en las negociaciones de nuestro país enfocadas a acuerdos comerciales bilaterales, regionales o multilaterales.
Estos importantes instrumentos del derecho internacional se complementan con las leyes nacionales y sus reglamentos así como con las normas, acuerdos, decretos y manuales derivados de ellos, con la finalidad de regular y ordenar las actividades que permiten, por un lado, el crecimiento económico y, por otro lado, hacerlo compatible con el manejo integral de mercancías sujeto a condicionantes ambientales.
De este modo, se promueve el desarrollo sustentable y se previenen daños a la gran biodiversidad mexicana, al medio ambiente y a la salud pública.
La PROFEPA, convencida de que las políticas públicas deben tener un fundamento legal sólido además de ser participativas y transparentes para ser eficientes y redundar en beneficios sociales, empezó en el año 2001 con un proyecto de regularización y modernización de los puntos de atención al gremio que se dedica al comercio exterior, de modo que en 1996 se contaba con 5 oficinas y en este 2018 se cuenta con 57 de ellas que atienden 67 puntos de revisión.
Al mismo tiempo se ha homogenizado el procedimiento de verificación y se ha automatizado el esquema de atención al ciudadano, de modo que la plantilla de verificadores actúa bajo un mismo esquema a lo largo y ancho del país y el ciudadano que desee importar, exportar o reexportar mercancías que deban cumplir con restricciones no arancelarias ambientales hoy en día puede solicitar el servicio usando el internet y agendando una cita para la revisión de los documentos y de la mercancía.
Ejemplo de lo anterior es la Aduana de Tijuana donde, a decir de los representantes de la CANACO-Tijuana en una reunión efectuada el viernes 19 de este mes en las instalaciones de la autoridad aduanera, actualmente se tiene un tiempo de atención de máximo 20 minutos para la revisión de las mercancías forestales que se importan.
Otro ejemplo de este importante esfuerzo modernizador es que, en el año 2012, el Proyecto de Interconectividad Electrónica SEMARNAT-PROFEPA en materia de comercio exterior de mercancías forestales obtuvo un reconocimiento como una de las 100 mejores acciones en materia de mejora de gestión para la administración 2007-2012 del gobierno federal.
Además del marco legal enfocado a los temas ambientales, este trabajo se encuentra alineado a la Ley del Comercio Exterior, a la Ley Aduanera y a la Ley Federal del Procedimiento Administrativo, y ha sido auditado en diversas ocasiones por las unidades de control del sector ambiental, de la Secretaría de la Función Pública e incluso de la Auditoría Superior de la Federación, quienes han concluido que en todo momento se actúa dentro del marco legal vigente y en beneficio del ciudadano.
Es de resaltar que el trabajo de verificación que realiza la PROFEPA en los sitios de ingreso y salida de mercancías y personas a o desde nuestro país ha respondido a la globalización de los movimientos transfronterizos así como a los adelantos tecnológicos para hacerlos.
De este modo y con la finalidad de ampliar su cobertura geográfica y ofrecer servicios de calidad al ciudadano, desde el año 2002 la PROFEPA ha implementado un mecanismo que permite, por un lado, ahorrar gasto corriente al erario público, y por otro lado, hacer más eficaz el trabajo cotidiano en las oficinas de revisión.
En las aduanas en las que se ha modernizado o creado infraestructura, la PROFEPA ha convenido el contar con espacios dentro del recinto fiscal con la Administración General de Aduanas y el Instituto de Avalúo y Administración de Bienes Nacionales (INDAABIN), lo cual se formaliza con una carta de asignación de espacios y un pago mensual de renta y servicios así como la provisión de equipo y personal por parte de la Procuraduría.
En caso de que los recintos fiscales no cuenten con espacio disponible, la PROFEPA ha convenido, con agrupaciones o personas morales del sector productivo que tengan la concesión para operar como recintos fiscalizados o autorización como punto de inspección y que cubran los requisitos de infraestructura necesarios para realizar las revisiones, el proveer de personal oficial que haga las actuaciones.
Para el caso mencionado en el párrafo anterior, la PROFEPA celebró, en el año 2005, un Convenio de Concertación con la Confederación de Asociaciones de Agentes Aduanales de la República Mexicana A.C. (CAAAREM) cuyo objetivo es fortalecer los esquemas oficiales de revisión de mercancías sujetas a comercio exterior, además se ha mantenido una estrecha colaboración con la Confederación Latinoamericana de Agentes Aduanales A.C. (CLAA) para el mismo fin. En este caso, se formaliza un contrato de comodato con la Asociación de Agentes Aduanales local o con un concesionario fiscal autorizado, el cual señala claramente los derechos y obligaciones de las Partes Contratantes así como la vigencia del instrumento legal.
La PROFEPA hace un cobro de derechos por la verificación de mercancías que realiza, el cual se opera a través del sistema E5 de SEMARNAT y cuyo monto va a la Tesorería de la Federación directamente. El monto de este pago se encuentra establecido en la Ley Federal de Derechos emitida por la hacienda pública y se actualiza semestralmente.
Dado a que el volumen del comercio transfronterizo entre México y Estados Unidos de América ha aumentado exponencialmente en los últimos 20 años, ha sido un gran reto para la PROFEPA el contar con instalaciones dignas que permitan atender la demanda ciudadana. Actualmente, la PROFEPA tiene 13 oficinas instaladas en esa frontera que hacen revisiones en 24 puntos de atención, desde Tijuana hasta Matamoros, en los horarios hábiles habilitados por la SEMARNAT.
En el caso particular de la oficina ubicada en la Aduana de Tijuana, esta empezó a operar dentro del recinto fiscal en el año 2002 con el apoyo de la CANACO-Tijuana quien proveyó una caseta para su instalación en uno de los patios dada la falta de espacio en el edificio de oficinas.
En el año 2015, la Administración General de Aduanas inicio la remodelación general del recinto fiscal con la finalidad de implementar el Proyecto de Innovación Tecnológica Aduanera (PITA) por lo que PROFEPA, en un esfuerzo conjunto con esa autoridad aduanera, se enfocó en encontrar una opción viable que permitiera seguir brindando el servicio de verificación dada la importancia de este cruce para el comercio de mercancías forestales y residuos peligrosos destinados a la industria maquiladora y al interior del país.
Durante este proceso se recibieron propuestas por parte de la Asociación de Agentes Aduanales de Tijuana, de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana A.C. (ANIERM) así como de un concesionario privado quien ya contaba con la autorización legal para hacer revisiones a diferentes tipos de mercancías, incluyendo las agropecuarias, y quien trabaja con SENASICA.
Estas propuestas fueron evaluadas con criterios técnicos, siendo uno de los requisitos fundamentales el tener colindancia con el recinto fiscal y contar con un acceso a un carril de retorno a EUA para las mercancías que no cumplieran con las leyes y la normatividad mexicana.
De este modo, en septiembre de este año y tras 3 años de buscar la mejor opción para los agentes de comercio exterior y que, al mismo tiempo, permitiera hacer cumplir el marco legal internacional y nacional, se formalizó un contrato de comodato dictaminado por las áreas jurídicas de la PROFEPA.
Ante las diversas inquietudes externadas en la última semana por algunos actores económicos, en voz propia y a través de algún integrante de la nueva legislatura, sobre la nueva situación del punto de revisión ubicado en la Aduana de Tijuana-Mesa de Otay, la PROFEPA ha atendido de manera inmediata y oportuna organizando 2 reuniones, una el día martes 16 en sus oficinas de la Ciudad de México con la presencia del C. Procurador, Dr. Guillermo Haro, y otra el viernes 19 en la ciudad de Tijuana, en conjunto con la Administración General de Aduanas y el Administrador de esa aduana.
Como resultado de las reuniones se acordó el seguir ofreciendo el servicio de verificación en la Aduana de Tijuana bajo el nuevo esquema que ha permitido una mayor eficiencia y que la Administración General de Aduanas planteará una opción para que PROFEPA cuente con instalaciones para realizar las revisiones de su competencia legal dentro del recinto fiscal modernizado, como una forma complementaria de seguir facilitando el comercio de mercancías entre México y los EUA en este importante cruce fronterizo.
Finalmente, la PROFEPA, como una autoridad federal que vigila y aplica la ley, reitera que sus actuaciones de verificación e inspección siempre se han conducido dentro del marco legal vigente mediante procedimientos estandarizados, fundados y motivados, de forma transparente y rindiendo cuentas ante la sociedad mexicana, facilitando el comercio exterior y con un firme compromiso de lucha ante cualquier posible acto de corrupción que se pudiera detectar.