LÁZARO CARDENAS, MÉX.- Las aduanas mexicanas captan el 29% de la recaudación nacional, pero enfrentan un enorme reto de transformación hacia la consolidación de organismos inteligentes y transparentes, con el fin de que en 2030 arriben a una era totalmente digitalizada y 100% invisible que facilite el comercio exterior, dijo Andrés Palazuelos Pérez Oronoz, VP Ejecutivo de la Confederación de Asociaciones de Agentes Aduanales de la República Mexicana (Caaarem).
En el marco del 10° Encuentro de Negocios del Puerto de Lázaro Cárdenas, el directivo apuntó que el sector aduanero debe distinguirse en tres grandes áreas: recaudación, competitividad, así como control y seguridad nacional, “por ello, la Administración General de Aduanas debe dirigirse hacia el desarrollo de servicios inteligentes, transparentes, competitivos, colaborativos y globales”.
“En el caso de las navieras trabajamos ya, mediante la revalidación electrónica, buscamos no tener que esperar a que llegue la carga, que baje el contenedor para empezar los trámites; días antes desde que sale la carga del puerto de origen nosotros empezamos a revalidar y a liberar […], a pagar a la naviera para el momento en que llegue el contenedor se descargue del barco y nos lo podamos llevar inmediatamente sin tener que hacer nada”, puntualizó.
En tanto, en el caso de las aduanas, “hacia 2030 deberán iniciar una era de documentos digitalizados, aduanas trabajando como franquicias, y hacia un cambio de visión integral”, de hecho dijo, “se está implementando el despacho anticipado que agilizará y facilitará los trámites”.
“Tenemos que pensar en que las aduanas marítimas son aduanas de paso, no de almacenaje, la carga no tiene que estar dentro de la aduana, se tiene que descargar del barco e inmediatamente irse a un lugar donde se vaya a despachar afuera del puerto”.
En las proyecciones a mediano plazo, se deberán realizar auditorías 100% electrónicas hacia 2020, contar con la ventanilla única regional, el despacho conjunto en todas las aduanas, la creación de las operadoras logísticas y contar con un sector completamente automatizado.
A largo plazo, 2025-2030, la ventanilla única debe ser digital, una aduana invisible 100%, para que prácticamente la carga sea descargada conforme llega el barco y dirigirse a sus lugares de destino.