Es un momento importante para desarrollar al sector – Álvaro Vargas Briones Catedrático de posgrado en la EBC
El Tren Maya viene encarrilado. El proyecto propuesto por la nueva administración es una apuesta para elevar el turismo e impulsar el crecimiento económico en el Sureste mexicano, pero con su implementación también se abre una oportunidad para reactivar a la industria ferroviaria en el país.
Analistas coinciden en que este plan de infraestructura atraerá la atención para que los ferrocarriles en el país tengan un nuevo aire y con esto se active al sector y se detone su crecimiento, después de su privatización en México en 1997.
Por ahora, la mayor parte de la red ferroviaria se emplea de forma privada para el transporte de carga, un par de líneas de trenes turísticos y el Ferrocarril Suburbano del Valle de México, que transporta a pasajeros entre la capital del país y el Estado de México.
Datos de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF) revelan que durante el año pasado se transportaron aproximadamente 126.9 millones de toneladas de mercancías y 56.7 millones de pasajeros.
La mayor parte de la vía se emplea para el transporte de mercancías
Para Álvaro Vargas Briones, catedrático de posgrado en la Escuela Bancaria Comercial (EBC), con el desarrollo del proyecto que se planea construir en la Península de Yucatán la industria ferroviaria estará en la mirada de los desarrolladores ante la llegada de los avances tecnológicos que se emplearían durante el proceso de su construcción.
“Un proyecto de esta naturaleza incorporará tecnología de punta, puede impulsar que se desarrolle más el sector y que adquiera un papel preponderante como sucede en algunas naciones de Europa, siempre y cuando se considere la participación de inversión nacional y extranjera”, opina el especialista en finanzas.
DESARROLLO FERROVIARIO
El territorio nacional cuenta con una infraestructura que comenzó a desarrollarse con Ferrocarriles Nacionales de México (FNM), empresa del Estado que se encargó de su operación hasta su privatización en el sexenio de Ernesto Zedillo.
En la actualidad, la red de ferrocarriles desplegada en el país conecta a los principales puertos y zonas fronterizas; sin embargo, la infraestructura se encuentra descuidada, hecho por el que necesitaría de inyección de capital para su mantenimiento.
Carlos Alberto Jiménez, director del doctorado en Administración en la Universidad La Salle, señala que existe una oportunidad para detonar el transporte de pasajeros vía férrea, ya que el 98 por ciento de los viajes en México se realizan por vía terrestre.
Esta opción, antes de la política privatizadora, permitía a pequeños productores realizar viajes en distancias cortas entre comunidades para transportar mercancías sin la necesidad de intermediarios.
La actividad comercial podría renacer con los trenes, ya que se abarata el transporte y también se puede integrar a estas comunidades que se encuentran aisladas desde la expropiación de FNM, más allá de los beneficios turísticos.
“La privatización causó un aislamiento de comunidades. En los países desarrollados este es el sistema de transporte más eficiente” – Carlos Jiménez Investigador de la Universidad La Salle
“El desarrollo es viable si volteas a los países desarrollados, su sistema de transporte más eficiente es el ferrocarril. En México se puede compartir el derecho de vía a partir de una logística muy bien desarrollada entre empresas cargueras y las que se dedican al transporte de pasajeros”, explica Jiménez.
DELINCUENCIA, EL GRAN RETO
Reactivar una industria que lleva años rezagada en el país frente a otros medios de transporte tampoco sería tarea sencilla.
Además de la modernización del sistema, otro de los retos que enfrenta la industria es el robo de componentes de vía, como el acero y los asaltos a las cargas de los trenes.
Durante el segundo trimestre de este año se reportaron mil nueve robos, de los cuales 92.5 por ciento fueron hurtos de carga y mercancías, de acuerdo con cifras de ARTF.
Le sigue el robo de material rodante como frenos, cables brincados y otros componentes y por último los robos a vía que, de abril a junio de este año, sumaron 330 ilícitos.
El especialista en finanzas de la EBC comparte que las medidas de control y seguridad pueden mitigarse con proyectos integrales en los que el gobierno ofrezca certeza jurídica a los posibles inversionistas.
Álvaro Vargas Briones añade que aprovechar el tendido de vía que ya existe para replicar proyectos como el Tren Maya también permitiría el desarrollo económico de zonas marginadas del territorio nacional.
El académico además considera posible la creación de un clúster ferroviario donde converjan los trenes de diversos polos del país, y que requeriría la participación de la academia, la industria privada y los gobiernos federal y estatal.
“Un proyecto integral no sólo se trata de construir vías o comprar vagones, sino generar desarrollo, así como integrar a las poblaciones, con la participación de pequeñas, medianas y grandes empresas”.