José Aguilar Méndez, vicepresidente de la Asociación Nacional de Almacenes Fiscalizados, advirtió que el sector automotriz es el que tiene mayores riesgos en el T-MEC, por lo que se tiene que cuidar y revisar bien antes que el Congreso ratifique el acuerdo.
El 30 de noviembre, los presidentes de Canadá, Estados Unidos y México firmaron el T-MEC, acuerdo de libre comercio que reemplaza al TLCAN. Ahora los congresos de cada país trabajan en la revisión del tratado, para ser ratificado.
Aguilar Méndez señaló que hay ciertos puntos del T-MEC que son muy importantes para la industria automotriz, como los de las reglas de origen.
Dijo que el TLCAN exigía que al menos un 62.5 por ciento de la producción de un automóvil se llevara a cabo en alguno de los tres países suscritos en el tratado, sin embargo, el nuevo tratado contempla que ese porcentaje sea de 75 por ciento.
El vicepresidente de ANAF señaló que dentro del tratado se contempla que entre el 40 y el 45 por ciento de un auto fabricado en territorio de alguno de los tres países, deba ser fabricado por empleados que al menos ganen 16 dólares por hora.
“Entendemos que quieren crear igualdad laboral donde hoy es un salario mínimo profesional y que se dice que México sea una mano de obra barata, técnica y muy profesional, pero a nosotros nos preocuparía que esta industria que contribuye mucho con el País, tenga un problema o afectación en el incremento al costo directo de la producción del servicio y la producción de automóviles”, señaló.
Dijo que la industria tiene a muchos proveedores directos e indirectos, genera mucho trabajo, y por eso es que la intención principal del Congreso debe ser resguardar el acuerdo dentro del tratado, para que no vaya a tener un impacto mayor que comience a frenar las exportaciones.
“Si hoy nuestro Congreso no tiene mucho cuidado en esta revisión, puede afectar a las mercancías que pasan por los Almacenes Fiscalizados de los agremiados”, aseguró.
Aguilar Méndez señaló que la Asociación Nacional de Almacenes Fiscalizados trabaja de manera coordinada para visibilizar ese tipo de circunstancias, de ahí que el Congreso y la Cámara de Senadores deben revisar cuáles podrían ser las reglas en los temas laborales.
Dijo que la cláusula sobre el incremento de salarios puede afectar a la industria automotriz, ya que si bien señala que se debe de incentivar la creación de más empleos, también dice que los trabajadores dedicados a la industria automotriz deben tener un beneficio de 16 dolares por hora, sin importar el tecnicismo, la capacidad, la experiencia, los años de antigüedad, ni el perfil que cada una de estas personas tengan hoy en día.
Señaló que el Congreso debe especificar los perfiles, detallar de manera más específica cuándo los trabajadores deberían de ganar ese salario mínimo profesional, porque la ANAF considera que no todos los que contribuyan para la elaboración y fabricación de un vehículo tendrían que ganar ese mínimo salario por hora, por eso la intención es que se determine quiénes y en qué momento deben estar ganando ese salario.