Pese a que las exportaciones de México hacia Estados Unidos han aumentado desde que éste inició una guerra comercial con China, nuestro país no le ha sacado provecho a todo el potencial que tiene frente a esta situación, aseveró Víctor Reyes, director general de la Asociación Mexicana de Exportadores (Amexport).
El directivo mencionó que una limitante para México es no contar con algunos certificados para productos de consumo humano, e incluso la falta de profesionalización entre Pymes.
“Si aprovechamos las oportunidades que nos está dejando la guerra comercial sin duda, las exportaciones podrían crecer más. Estamos en un buen momento al que le podemos sacar mucha ventaja, tal y como lo ofrece la demanda de estas naciones”, aseguró.
El directivo indicó que hace falta organización, así como disminuir una barrera importante entre el idioma y la distancia, porque “siempre es más fácil mandar hacia Estados Unidos, porque su ubicación geográfica nos conviene. Pero cuando hay problemas, como cuando nos quiso poner aranceles, es cuando recordamos la importancia de diversificar mercados”.
En este sentido, Jun Dai, representante de la Asociación de Empresarios Zhonghua en México, dijo que el país necesita firmar un convenio con China para tener una mayor apertura en el mercado asiático, por lo que insistió en tener una comunicación permanente con el Gobierno mexicano para que se logre de manera más rápida.
En contraste a ello, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por su sigla en inglés) aseguró que México es la segunda nación en aprovechar la guerra comercial entre Estados Unidos y China, sólo después de Taiwán. Las exportaciones nacionales hacia al país del norte incrementaron a tres mil 570 millones de dólares.
Dentro de los segmentos que más se beneficiaron se encuentra la maquinaria eléctrica, con un valor de 876 millones de dólares; también destacaron los productos agroalimentarios, con 599 millones de dólares; equipo de transporte, con 456 millones de dólares; maquinaria de oficina y otros, por 420 y 407 millones de dólares.
“Los consumidores estadounidenses están pagando los aranceles en términos de precios más altos. No sólo los compradores finales, sino también importadores de productos intermedios, empresas que importan partes y componentes de China”, aseveró Alessandro Nicita, economista de la agencia comercial de la ONU, UNCTAD.
Cabe recordar que desde mediados de 2018, Estados Unidos y China se han visto envueltos en una confrontación comercial que ha resultado en varias rondas de aranceles de represalia. A lo largo de ese año, la administración estadounidense mplementó medidas comerciales para reducir las importaciones dirigidas a productos específicos (acero, aluminio, paneles solares y lavadoras) y luego específicamente a las importaciones procedentes de China.
La UNCTAD indicó que de las pérdidas de exportaciones chinas de 35 mil millones de dólares en el mercado estadounidense,. Cerca de 21 mil millones (63 por ciento) se desviaron a los países benficiados y otros, y los restantes 14 mil millones fueron perdidos o capturados por los productores estadounidenses.
*Fuente: https://www.razon.com.mx/