Esta iniciativa traería una afectación de al menos 70 por ciento de la producción de este grano y encarecería los costos de producción al tener menos rendimiento.
De acuerdo con Bosco de la Vega, esto provocaría incrementar cuatro veces –de 15 a 60 pesos– el precio de la tortilla, la cual en un 95 por ciento depende de híbridos de maíz blanco y es parte de la canasta básica.
Los maíces híbridos representan 60 por ciento de la siembra mexicana, con casi 7.5 millones de hectáreas, y señaló que ‘esta ley pone en riesgo a las semillas hibridas y mejoradas’.
Por ello, De la Vega Valladolid manifestó su preocupación ya que, incluso, ‘pegaría’ en el avance científico y tecnológico del país; de ahí la necesidad de hacer adecuaciones a la ley, aprobada hace unas semanas en el Senado de la República.
Explicó que el segundo párrafo del artículo 4 puede generar diversas interpretaciones al mezclar organismos genéticamente modificados con técnicas de mejoramiento.
Lo que queremos nosotros es que se especifique muy bien y que el tema de maíces híbridos, que es el 70 por ciento de la producción, quede incluido en esta ley y no sea vea afectado”.