Recordó que a principio de los años ochenta en el astillero de Veracruz se construyeron buque-tanques de gran envergadura para Petróleos Mexicanos con un alto nivel de tecnología al grado que aún siguen navegando pero luego se le dio la espalda a una de las industrias que más impacta de manera positiva en la generación de empleos.
Luego, agregó, “los siguientes gobiernos dejaron de mirar al mar” y el caso más evidente fue el gobierno de Peña Nieto cuyo director de Pemex, Emilio Lozoya, compró en España el astillero chatarra Hijos de Juan de la Barrera que actualmente está en quiebra.
Dominguez García llamó al gobierno federal de la Cuarta T a promover una iniciativa para que desde el Congreso de la Unión se legisle a favor de la industria naval mexicana para estar en condiciones de competencia con los astilleros de los países socios comerciales de México.
Afirmó que la empresa Tallares Navales del Golfo, construyó cuatro remolcadores; el último se entregó hace un año y desde ese tiempo a la fecha se mantiene con trabajos de mantenimiento y reparación naval pero están preparado para reiniciar la construcción naval de gran calado.
A la falta de construcción naval se están diversificando en la construcción de estructuras para industria petrolera u off shore, puentes y hasta tanques de almacenamiento; el astillero general entre 900 y mil 1500 empleos directos anualmente, concluyó.
Danytza Flores.
*Fuente: https://www.ptc.mx/
