A principios de los 90, Corporación Multimodal obtuvo una de esas primeras concesiones portuarias para operar carga perecedera en Manzanillo, propiedad de Renato Ibarra y Gerardo, su hijo, quienes utilizaban los servicios aduanales de AVSA, la agencia de Arturo Villaseñor Sánchez.
La realidad del puerto era otra. Por ponerlo en perspectiva, en 1993 apenas manejaba 51 mil contenedores de 20 pies (TEU) al año, contra poco más de tres millones que mueve actualmente.
En junio de 1999, después de trabajar algunos años juntos como cliente – proveedor, Gerardo Ibarra y Arturo Villaseñor sostuvieron una llamada telefónica en la que decidieron crear una empresa; acordaron reunirse y concluyeron ponerle el nombre de Alianza Estratégica Portuaria, misma que se formalizó en septiembre de ese mismo año.
Un vehículo modelo Tsuru habilitado como oficina fue la plataforma para las primeras operaciones de la empresa importadora creada por Gerardo Ibarra, quien comenta en entrevista que posteriormente las oficinas fueron dos casas separadas por escasos metros, la suya y la de Arturo Villaseñor, el primer Director General de Alianza.
A partir de ahí, sus diferenciados servicios comenzaron a distinguir a la empresa de su competencia y el efecto sigue hasta ahora, pues es líder en Manzanillo y otros puertos como Lázaro Cárdenas y Tuxpan, así como en su esquema de trabajo con cobertura en más de 25 aduanas en el país.
Este proceso quizá hubiera sido más lento si no hubiera integrado en 2001 una tercera unidad de negocio transportista llamada…
