Afectaciones, principalmente en las adquisiciones e importaciones que vienen de otros países, es lo que reportan expertos consultados por Crónica de Hoy Jalisco, respecto a la inestabilidad cambiaria que ha mostrado el peso ante el dólar
Héctor Pérez Partida, titular de la Secretaría de Planeación, Administración y Finanzas (Sepaf), aseguró que la volatilidad cambiaria que ha tenido el peso frente al dólar, no afecta en mayor medida a las finanzas estatales, pues al ser poco lo que se llega a importar, podría generar un mayor consumo de productos a empresas locales.
“El dólar todavía se ha mantenido volátil, vamos a esperar el comportamiento para poder hacer un estimado de cuánto pudiera afectar en la compra de vagones aunque por lo general esta compra se realiza a plazos, porque tardan en fabricarse entre dos o tres años lo cual implica no tener que pagarlos en el momento”.
Algunas de las adquisiciones que tendrá este 2015 el Gobierno del Estado, comprenden bicicletas para el Programa Mi Bici y que deberán importarse de Canadá y la posible compra de vagones para la Línea 1 del Tren Ligero, aunque estos últimos, se está buscando adquirirlos de manera conjunta con el Estado de Monterrey, quien también tiene planeado realizar una compra en este sentido, para así obtener un mejor costo de los mismos.
De acuerdo con el presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce) de Occidente, Miguel Ángel Landeros, contrario a lo que pudiera pensarse, la fluctuación de la moneda “no conviene” a los sectores industriales dedicados a la actividad exportadora. “Los exportadores deseamos incluso que haya un dólar estable; la volatilidad no conviene a nadie. Estamos trabajando de la mano con el gobierno, yo creo que más bien lo que falta es ahorita seguir trabajando, impulsando lo que cada uno tiene que hacer”.
Aunque Jalisco tiene un gran potencial exportador y mantiene el liderazgo en sectores como tecnologías de la información, autopartes e industria alimentaria, hay otros rubros como el joyero que al depender de la importación de algunas materias primas empiezan a tener dificultades, dijo.
Sin embargo, Ignacio Román, académico del Departamento de Economía, Administración y Mercadología del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), señaló que siempre que ocurre un fenómeno de este tipo, de una depreciación de la moneda, evidentemente se tienen un efecto de balance negativo, aunque aseguró que ante estos escenarios, siempre hay beneficiarios y siempre hay perjudicados.
“En el punto en el que estamos pasando por lo pronto, uno pensaría que los sectores exportadores se verán beneficiados, porque el peso va a estar más barato que el dólar y para los compradores de productos mexicanos en el extranjero, les resultará más barato esta compra. De igual manera, puede beneficiar a aquellos productores que sean competitivos con productos extranjeros, es decir, si por ejemplo se comparan productos de ambas naciones, podemos hablar del chocolate, uno mexicano contra uno de Estados Unidos, la gente va a preferir el mexicano porque será más barato, lo cual podría resultar en un efecto beneficioso”.
Es posible que tengamos algún repunte de inflación -indica Ignacio Román-, y lo que resulta delicado es en aquellos productos que son básicos para el consumo, por ejemplo, México es un importador de productos alimentarios empezando por el maíz y en ese punto, es uno de los puntos rojos más importantes. También señaló que la afectación alcanzará la importación de maquinaria que elevará los costos de producción lo que sin duda llegará a repercutir en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (IEPC), sino en términos generales afectará al empresariado.
Destacó que es muy importante que en una estrategia de desarrollo económico, no apostarle solamente a las exportaciones, que es lo que ha hecho México en los últimos 30 años, se le debería de apostar de manera importante a la producción de los bienes que el propio país necesita, para que no sea tan vulnerable ante estas circunstancias. El Gobierno debería de apuntalar la producción agrícola, especialmente los granos como el frijol o el maíz, en lugar de generar apoyos a productos ‘de moda’”.
“…vamos a esperar el comportamiento (del dólar) para poder hacer un estimado de cuánto pudiera afectar en la compra de vagones”
