Antes de julio, el mayor incremento de las exportaciones nacionales durante el año se había observado en mayo, cuando se expandieron 6.7 por ciento. El avance de julio es el mayor desde el incremento de 12.6% observado en octubre del año pasado.
Las ventas nacionales fueron propulsadas por la demanda de Estados Unidos, pues los envíos a eses país crecieron 10.6%, mientras que los realizados al resto del mundo se contrajeron 0.3 por ciento.
El desempeño fue impulsado por un salto de 8.6% de las exportaciones no petroleras –que representan 94% de las exportaciones totales del país–, avance que fue modulado por el descenso de 14.1% de las ventas externas de productos petroleros, que atenuaron su descenso tras el tropiezo de 20.4% del mes previo, pero hilaron nueve meses de contracciones. Estas ventas representan el 6% restante de los envíos de mercancías del país.
En el renglón de las exportaciones no petroleras, el apartado de manufactura –que representa 95% de este rubro– tuvo una expansión de 7.9%, en donde la subpartida más importante, la automotriz, experimentó un avance de 12.6 por ciento.
Las exportaciones agropecuarias, que representan casi 4% de las exportaciones no petroleras tuvieron un notable salto de 30.7%, su mejor desempeño desde septiembre del 2016, cuando crecieron 31.5 por ciento.
Los crecimientos más importantes se reportaron en las exportaciones de uvas y pasas (217.1%), de legumbres y hortalizas frescas (115.1%), de aguacate (74.3%), de pimiento (35.6%) y de cebollas y ajos (16.7 por ciento).
De forma acumulada, a julio el valor de los envíos de mercancías desde México muestra un aumento de 4.2% que las lleva a un nivel récord de 266,574 millones de dólares, producto de un incremento de 5.2% de las exportaciones no petroleras y un retroceso de 10.1% de las petroleras.
Importaciones y saldo de la balanza
Por el lado de las importaciones, se observó en julio un crecimiento de 2% a 40,417 millones de dólares, reflejo de un avance de 4.7% de las no petroleras –que abarcan nueve de cada 10 dólares importados– y un descenso de 16.9% de las petroleras (uno de cada 10 dólares importados).
A su interior, las compras externas de bienes de consumo descendieron 0.7%, las de bienes intermedios (insumos para procesos productivos) subieron 5% y las de bienes de capital (maquinaria y equipo para procesos productivos) se hundieron 16.5%, baja solo superada por la de 21.2% observada en junio.
De forma acumulada, a julio las importaciones han crecido apenas 0.5% a 264,545 millones de dólares, gracias al aumento de 2% de la importación de bienes intermedios, que está compensado por la baja de 2.2% en el renglón de bienes de consumo y de 7.5% en el de bienes de capital.
Con estos resultados, el saldo de la balanza comercial en julio fue un déficit de 1,116 millones de dólares, 61% inferior al del mismo mes del año pasado. De forma acumulada, a julio se observa un superávit de 2,028 millones de dólares.
El 2012 fue el último año en el que México tuvo un superávit comercial, que a julio fue de 2,661 millones de dólares y cerró el año en 18.3 millones de dólares. De 1993 a la fecha la economía mexicana solo ha tenido superávits comerciales en cuatro ocasiones: 1995, 1996, 1997 y el 2012.
*Fuente: http://www.portum.mx/