Al asumir el gobierno del estado, una de las primeras instrucciones giradas por el gobernador del estado, Omar Fayad Meneses, en materia económica, “fue diversificar mercados, poner fin a la brutal dependencia de la industria hidalguense del mercado estadounidense, y del presidente que llegaba a mandar a esa nación, Donald Trum”, recordó el funcionario.
Gracias a esa instrucción, el 92 por ciento de los productos hidalguenses hoy tienen como destino naciones de Europa, Asia, el Pacífico, América Latina y Canadá, y por tanto, la amenaza de fijar un arancel del 5 por ciento a los productos mexicanos que crucen la frontera, con destino a Estados Unidos, a partir del próximo lunes, “si nos afectará, pero en menor medida.”
Romo Cruz subrayó además que esta medida unilateral adoptada por el gobierno estadounidense es contraria a los acuerdos establecidos en el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica, del nuevo T-MEC, y de la normatividad que rige al nuevo comercio en el mundo.
De llegar a aplicarse este arancel anunciado por el mandatario estadounidense, México podrá acudir a organizaciones como la Organización Mundial de Comercio, además de esgrimir los propios acuerdos comerciales entre ambas naciones, para impugnarlo.
“Existen dentro de estas organizaciones, de estos tratados comerciales, mecanismos para dirimir este tipo de controversias”, aseguró.
En esta situación, anticipó que “lo que veremos en los próximos meses es la discusión en este contexto para ver cómo procederá México… falta mucho por discutir en esos foros.”
Aunado a lo anterior, dijo, la afectación que generaría este arancel dependerá mucho de las regiones industriales del país. “Los sectores que más se verán afectados serán tres: el sector automotriz, y las manufacturas, esencialmente en electrónicos y maquiladoras, que es la que tenemos en el norte del país.” Un tercer sector afectado será el de agroalimentos procesados.”
En el caso de Hidalgo la afectación será baja, pues si bien hay muchos productos que aún se exportan a Estados Unidos, el grueso de las exportaciones tiene otros destinos en el mundo.
“Cuando arrancamos la administración teníamos el mismo problema que muchas otras entidades: el 80 por ciento de nuestras exportaciones tenían como destino los Estados Unidos, pero nos dimos de inmediato a la tarea de diversificar tanto nuestras exportaciones como en materia de inversiones.”
Recordó además lo señalado por el propio presidente Trump en que este arancel iría cambiando con el tiempo, es decir, “no existe claridad, definición al respecto.”
Hizo notar finalmente que de aplicarse este arancel, serán los propios consumidores estadounidenses los que terminarán pagando más caro las mercancía mexicanas a las que ya están acostumbrados.