En 1870 México solo recaudaba aproximadamente de 9,300 millones de pesos (-mdp- pesos actuales), en comparación a 1918, cuando el entonces mandatario Venustiano Carranza instituyó la figura del agente aduanal, logrando que el comercio se multiplicara hasta ocho veces, alcanzando un equivalente de 71,000 mdp.
Desde que se creó la figura del agente aduanal hasta ahora, el comercio exterior se ha multiplicado por 1,500, y ha contribuido al crecimiento de la productividad de las empresas mexicanas y al avance del país.
El creciente volumen del comercio exterior representa un reto para mantener la seguridad del país, vigilar la salud de los mexicanos, lograr que el gobierno recaude las contribuciones adecuadas y apoyar la productividad, y alcanzar todas esas metas sin entorpecer las operaciones. En México se realizan 31 operaciones de comercio exterior por minuto, 95% de ellas por medio de los agentes aduanales.
Para atender este reto, el gobierno y los particulares están comprometidos en la modernización del sistema aduanero, con la visión de Aduana del Siglo 21.
La Aduana del Siglo 21 es un proyecto de modernización y un esfuerzo que se construye en forma conjunta entre los agentes aduanales y el SAT, a fin de lograr un sistema fiscal y aduanero cada vez más eficiente.
Los pasos firmes que ha dado este sector se reflejan en datos fehacientes: la transformación comenzó en abril de 2016 con 17 compañías y en diciembre de ese año se inscribieron 64. Dichas instancias efectuaron 14,181 operaciones. Hasta mayo de 2016, 93 empresas operan bajo ese modelo y han efectuado 8,066 operaciones.
Otro ejemplo de los beneficios que aporta la Aduana del Siglo 21 es que la importación de autos usados es más segura y sencilla con el uso de sistemas y tecnología avanzados y con nuevas reglas publicadas por el gobierno federal.
Ahora se sabe con mayor certeza el historial de los vehículos a importar, se conoce a detalle las condiciones físico-mecánicas de los automóviles, si cumplen cabalmente con la norma ambiental, si tienen algún problema con el título de propiedad, entre otros. El uso de la tecnología refuerza los controles y a la vez hace más sencilla la importación segura de los vehículos usados.
En 2017, con más de 40 tratados de libre comercio firmados, México es un país abierto al mundo, comercia más de 14 billones de pesos anuales, esto es 1,500 veces más que hace 150 años y recauda en las aduanas casi 800,000 mdp, 256 veces más que en 1870, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Las aduanas y sus agentes son pilar de estos datos positivos.
ELEMENTOS DE LA ADUANA DEL SIGLO 21
Este modelo tiene cinco elementos que generan un nuevo sistema que facilita y atiende puntualmente al comercio exterior:
1. Aduana inteligente. Permite la automatización de procesos para hacer eficientes y seguras las operaciones de comercio exterior. Hay, por ejemplo, 14,000 cámaras de video-vigilancia con sensores que emiten alarmas. La Ventanilla Única de Comercio Exterior facilitará el cumplimiento de las obligaciones.
2. Aduana transparente. Destacan dos acciones innovadoras: la incorporación obligatoria del código QR en los pedimentos, y el Nuevo Manual de Operación Aduanera. Con el código, la autoridad puede tener información de la mercancía con mayor facilidad que antes, lo que hace más ágiles las operaciones. Los usuarios, los agentes aduanales y la autoridad pueden revisar en tiempo real el estatus legal de la mercancía.
3. Aduana competitiva. El uso de la tecnología mejora la infraestructura aduanera. Hay 38 proyectos a los que se han destinado más de 9,500 mdp desde 2013 y hasta 2018. Hay 15 de ellos concluidos, por un monto superior a los 3,000 mdp.
4. Aduana colaborativa. Se refiere a trabajar en coordinación con los usuarios para, por ejemplo, evitar que ingrese mercancía subvaluada.
5. Aduana globalizada. La adopción de las mejores prácticas internacionales gracias al intercambio de información con nuestros principales socios comerciales.