El canciller de México, Marcelo Ebrard Casaubón, reveló que en la administración de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), los embajadores nuevamente tendrán injerencia en el ámbito comercial, a la vieja usanza.
Recientemente, López Obrador, presidente electo de México, dio a conocer que ProMéxico, dependencia del Gobierno Federal creada en 2007 con el objetivo de atraer inversión extranjera al país, así como promover las exportaciones de México alrededor del mundo, desaparecerá en cuanto tome posesión del cargo.
El programa mexicano opera en ciudades clave como Moscú, Shanghái, Nueva York, Los Ángeles, Londres, Miami, Madrid, Dubái, San Francisco, y surgió con la intención de impulsar intereses como el automotriz, el electrónico, aeroespacial, y de autopartes.
Sin embargo, recientemente salió a la luz que las labores que actualmente desempeña ProMéxico serán asignadas a los embajadores, con la finalidad de eliminar ‘una estructura paralela en el presupuesto, pues en el resto del mundo una persona adicional en la embajada se encarga de dicha función’.
Ante esto, Ebrard confirmó que en la administración de AMLO los embajadores de México también estarán habilitados para atender temas de promoción comercial:
El Servicio Exterior Mexicano va a recuperar muchas de las funciones, facultades, que a lo largo del tiempo se le fueron retirando, una de ellas fue la promoción económica y comercial”.
Agregó que el Servicio Exterior de México ‘va a tener un papel muy relevante’, e hizo énfasis en la importante labor que un embajador desempeña, asegurando que se buscará fusionar el diálogo político con la promoción comercial y económica:
Una parte muy importante de los intereses de México es la economía, el comercio, la inversión, el turismo, todo eso lo va a tener que ver ahora la cancillería; los embajadores tienen esas funciones, además del diálogo político y otras cosas”.
