A juicio de Ildefonso Guajardo Villarreal, ex secretario de economía del gobierno federal, el Tratado México, Estados Unidos, Canadá, T–MEC es viable para los tres países, en la medida que cuenten con una industria de transporte de carga plenamente integrada en aspectos logísticos, los cuales faciliten todos los procesos productivos y comerciales de cada nación.
El reto es aumentar la eficiencia y la competitividad en todas las actividades logísticas a nivel regional e internacional, lo que conllevaría reducir los costos del transporte.
El ex funcionario federal, expuso el tema “T–MEC ante la nueva realidad del autotransporte de carga”, ante empresarios del sector del estado de Nuevo León afiliados a la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga, Canacar, a quienes sugirió aprovechar las ventajas que plantea el nuevo acuerdo tri-nacional, donde la parte local debe involucrarse de lleno con las actividades que se realicen por parte del Comité de Servicios de Transporte, CST, que será integrado por representantes de las autoridades nacionales con el comercio y el transporte, que permite invitar a las reuniones, cuando sea apropiado, a representantes de la iniciativa privada, sobre todo en lo referente a la discusión y evaluación de los asuntos relacionados con la implementación y operación de las obligaciones relacionadas con los servicios de transportación en los Capítulos 14 (inversión) y 15 (comercio transfronterizo de servicios), entre los más relevantes.
Lo anterior porque, dijo, los integrantes del CST, deben comenzar a preparar, desde hoy, las revisiones que pudieran realizarse en cinco años para, con información objetiva y datos específicos, avanzar en cuanto a la liberación, con enfoque especial en los temas de inseguridad que afectan al transporte de comercio exterior.
También advirtió que una salvaguarda contenida en el T–MEC que podría limitar el otorgamiento de permisos a transportistas mexicanos, se activaría en la medida que se presenten dos condiciones:
1.– Que haya afectación a los transportistas de Estados Unidos.
2.- Que la afectación haya sido causada por transportistas mexicanos.
En torno a ello, el T–MEC establece que en un plazo de cinco años se revisará si se ha usado la salvaguarda, de lo contrario se eliminaría.
Lo anterior porque, dijo, la falta de seguridad en las carreteras afecta la eficiencia y productividad del autotransporte, al tiempo que genera elevadas pérdidas e incrementa los costos de operación.
Por ello recomendó a los transportistas involucrarse activamente en las secciones correspondientes del citado comité, con la finalidad de lograr adecuada implementación de las nuevas reglas de facilitación comercial y con ello obtener la garantías para que se logre fluidez logística y sin barreras en el proceso de cruce fronterizo, tanto en Estados Unidos como en Canadá.
La sustitución de proveedores de Asia y otras regiones del mundo, como plantea la puesta en vigor del T–MEC para elevar el grado de contenido regional y local, generará impactos en la actividad portuaria, fortaleciendo así el tránsito de mercancías y la logística en las ferrovías y en las carreteras nacionales.
Aseguró que el T-MEC brinda oportunidades derivadas de la incorporación regional de valor; sin embargo, si el país y sus sectores económicos no hacen lo adecuado en cuanto al aprovechamiento de las políticas públicas y la inversión en infraestructura, se podrían descuidar las oportunidades que el acuerdo genere, sobre todo por la dinámica que tendrán las economías de Estados Unidos y Canadá.
Por ello es crucial, aseguró, que todas las industrias conozcan la magnitud de los retos actuales de su sector, tomando en consideración que ante las condiciones de competencia regional, no será sencillo para nadie crecer.
Como parte de lo anterior, señaló la importancia que tiene el acuerdo en la estrategia política del presidente Donald Trump para lograr su reelección, que dijo, no quiere llegar a noviembre con una economía que actualmente afecta de manera severa a la sociedad estadounidense, sobre todo por la pérdida de empleos.
Precisó que Trump va a querer utilizar el T–MEC para demostrar a sus electores que lo renegoció a favor de Estados Unidos.
En contraste, México tiene la oportunidad de atraer la inversión que se desplaza de China, por la vía de destacar las ventajas del país para la integración productiva de América del Norte, ya que hay ventajas comparativas diferenciales para lograr que productos que se manufacturan en Asia, lleguen a esta región.
Del escenario económico del país, Guajardo Villarreal dijo que se muestra severo (México tendrá mayor caída que la pronosticada de otras economías emergentes), sobre todo porque:
-La federación no desarrolló una estrategia contra-cíclica.
-No quiere endeudarse en condiciones manejables a mediano y largo plazo.
Del sector automotriz, dijo que aunque se reporta la recuperación del sector, no alcanzará para lograr los niveles de fabricación logrados en 2019 o en años previos.
En la presentación, en la que participaron Rogelio F. Montemayor Morineau, ex presidente de la Canacar, Brenda Elizabeth Pérez, Anayansi López, Jorge Alberto Dávila Villar, Eduardo J. Lozano, Alfredo Giovanni González Villegas, Jonathan Torrecillas, Juan Gerardo Bortoni González, Leopoldo Chow, Armando Martínez, entre otros empresarios transportistas, Ildefonso Guajardo declaró su intención por buscar la gubernatura de Nuevo León.
Fuente:
Miguel Angel Silva Méndez-http://www.automotores-rev.com/elevar-eficiencia-y-competitividad-por-t-mec-i-guajardo-a-socios-canacar/