Ciudad de México.-Esos tres principios son: defender con firmeza el terreno ganado en los mercados internacionales, que México siga abierto al mundo porque la relación con Estados Unidos “no es ni debe ser su única alternativa” e impulsar el mercado interno que representa la mayor fuerza y potencial del país, detalló.
El dirigente empresarial consideró que aunque la Constitución abrió un camino para el desarrollo, México aún tiene un gran tramo que recorrer y éste es un momento que exige “una gran definición de los mexicanos para seguir avanzando” y crear nuevas formas para impulsar el trabajo, los negocios, la industria y el campo, sobre todo por un entorno internacional de mayor competencia y cambio tecnológico.
A los tres poderes de la Unión y los tres niveles de gobierno, el dirigente del organismo cúpula del sector privado les exigió cumplir con su responsabilidad para garantizar el Estado de derecho y eliminar “de una vez por todas” las prácticas de ineficiencia y corrupción, porque limitan el crecimiento económico del país.
México, dijo, no puede dar un paso atrás ni cerrarse al proteccionismo porque significa aislacionismo por lo que se tiene que defender con firmeza el terreno ganado en los mercados internacionales en todas las instancias necesarias y recordó que que a la fecha es el onceavo país más competitivo del mundo, de acuerdo con el Foro Económico Mundial.
Como parte del segundo principio enunciado, expresó que el país debe seguir abierto al mundo, diversificando mercados porque Estados Unidos no debe ser la única alternativa y aseguró que países de Europa, Asia y América están buscando acercamientos para incrementar sus inversiones en México y aumentar la demanda aquí por sus productos.
También ponderó el capital humano nacional al sostener que el 64 por ciento de la población está en edad de trabajar y que de acuerdo con la Unesco aquí se gradúan 26 por ciento más estudiantes de ingeniería, manufactura y construcción per cápita, que en Estados Unidos.
En cuanto al mercado interno, marcado como el tercer principio fundamental del sector privado, Castañón indicó que la mayor fortaleza es lo que los mexicanos compran y venden entre ellos, por lo cual las empresas y gobierno emprendieron una “cruzada” para fortalecer a las pequeñas y medianas empresas (pymes) con la campaña “Hecho en México”.
“Que no haya lugar a dudas, de la mano de nuestra Constitución, la iniciativa privada y la sociedad estamos preparados para hacer frente a nuestros propios problemas, a los que enfrentamos en estos tiempos y estas circunstancias porque frente a los retos del nuevo contexto internacional, el talento de nuestra gente y la innovación de nuestra empresas serán la clave para encontrar nuevos mercados, agregar mayor valor a nuestros productos y ser todos más competitivos, para la prosperidad de México y de los mexicanos”, enunció.
Juan Pablo Castañón puntualizó que “más que enmiendas, parches o grandes iniciativas, los mexicanos avanzaríamos con el ejercicio de nuestros derechos y el cumplimiento de las obligaciones que establece la Constitución, nuestra Constitución” y ponderó que a cien años de haberse promulgado contiene los principios para detonar el despegue de la patria como el respeto y sana convivencia entre trabajadores y empresas así como la vigencia de las garantías de la propiedad privada.
