Actualmente México cuenta con un nivel de infraestructura de clase mundial que le permite aprovechar las múltiples ventajas de la intermodalidad: puertos, vías férreas y carreteras que facilitan la transportación y movimiento de mercancías desde y hacia cualquier parte del mundo.
El servicio intermodal ferroviario forma parte de la articulación entre los diferentes modos de transporte para la movilización de carga, contribuyendo a incrementar la eficiencia de las cadenas de suministro, potenciando la capacidad productiva y la competitividad de un país, de ahí la relevancia que hoy tiene.
Las terminales intermodales en el país son eslabones clave para optimizar la cadena de suministro y favorecer el sistema de transportación de carga, siendo estratégicas ante la creciente complejidad de las cadenas de suministro y su globalización. El intermodalismo se ha convertido en un factor nodal para el comercio internacional, la integración regional y el desarrollo económico.
Kansas City Southern de México (KCSM), es una de las tres líneas troncales del Sistema Ferroviario Mexicano, que brindamos un servicio de transporte de carga en tiempo, confiable, accesible y eficiente en ambos lados de la frontera.
A través de sus tres terminales intermodales, ofrece un servicio integral a todo tipo de empresas, sin importar su tamaño.
Terminales intermodales:
1. Salinas Victoria, Nuevo León:
- La capacidad estimada es de 167 mil contenedores por año.
- Se ubica cerca de la ciudad de Monterrey, y atiende a la zona norte del país.
2. Interpuerto San Luis Potosí:
- Con una capacidad de 186 mil contenedores por año.
- Brinda atención a la región del Bajío, que actualmente tiene un desarrollo muy dinámico e importante que impacta en sus operaciones.
3. Puerta México, Estado de México:
- Su capacidad es de casi 150 mil contenedores y más de dos millones de toneladas de carga por año en más de 130 hectáreas.
- Esta terminal ha duplicado la capacidad intermodal disponible en la región del Valle de México, lo cual alivia el congestionamiento de la zona.
- Atiende las zonas industriales del Estado de México, la Ciudad de México y su Área Metropolitana.
En 2015 el movimiento realizado por la compañía estuvo liderado por tres segmentos, que sumados contabilizaron el 63% del total transportado el año pasado, que equivalió a ingresos por 734 millones 298 mil 559 dólares.
Cada uno de estos sectores registró el 21% del total movilizado el año pasado:
- Químicos y productos petrolíferos.
- Productos industriales y de consumo.
- Intermodal.
Potencial, ventajas y beneficios
De acuerdo con KCSM, la apertura del sector energético en México augura un panorama positivo para el país. Las previsiones del gobierno mexicano son que la reforma en la materia traerá inversiones de $62.5 millones de dólares para el 2018. Una de las mayores oportunidades es el desarrollo de infraestructura y logística de transporte que será necesario para apoyar las nuevas actividades de exploración y producción de combustibles.
El ferrocarril se convertirá en un “ducto rodante” por ser un de las mejores alternativas para el movimiento de diésel, gasolina y biocombustibles al interior de México.
Su participación en la transportación de combustibles contribuirá a reducir las carencias en refinerías; así como a atender el aumento de la demanda y mejorar la fiabilidad del suministro.
Con la reforma, se impulsarán no sólo los productos petrolíferos, también se dará empuje a aquellos insumos necesarios para una mayor explotación, como la llamada frac sand.
En el transporte de crudo, el ferrocarril destaca por su:
- Aumento en la cobertura de mercado.
- Flexibilidad para ofrecer a los mercados específicos una vía directa a la refinería o para mover el combustible en el lugar donde se realiza la producción.
- Tiempo de entrega más rápida por tren.
- Menores pérdidas durante el transporte.
- Horizonte de inversión más corto.
En resumen, las características que posee el ferrocarril le otorgan un gran potencial, así como una serie de ventajas y beneficios significativos como:
- Bajo riesgo de siniestros.
- Reducción de costos al erario.
- Reducción de tráfico en carreteras federales.
- Consistencia en los tiempos de entrega.
- Terminales de trasvase en las principales ciudades de México, Estados Unidos y Canadá, que permiten agilizar los trámites aduanales.
- Capacidad para transportar todo tipo de productos y adaptarse a las necesidades del cliente.
- Carros con una gran capacidad de carga.
- La generación de economías de escala.
- Uso eficiente del combustible y ahorros en la emisión de gases de efecto invernadero.
- Inventarios de mercancías en movimiento, lo que permite reducir los costos de almacenamiento.
