Las verduras congeladas vuelven a ser el ariete del sector agroalimentario regional en el exterior tras el bache sufrido el año pasado, cuando las exportaciones retrocedieron por primera vez en seis años, con un descenso de casi el 5%. El cambio de proveedores por parte de las cadenas comerciales de Reino Unido más el descenso de pedidos por parte de Alemania y Holanda fueron la causa. Sin embargo la facturación creció en enero un 14,3% gracias a la recuperación del mercado británico. Murcia se consolida como principal productor del país junto con Navarra, con una producción conjunta que supone el 66% del total nacional.
Uno de cada cuatro kilos de las verduras congeladas que España coloca en supermercados europeos salen de las cámaras frigoríficas murcianas. El año pasado fueron 121.590 toneladas (-3,1%), que generaron 131.517.831 euros (-4,9%). Con todo, para hacerse una idea del desarrollo experimentado por este subsector, la facturación de 2006 apenas fue de 50 millones.
La reciente expansión ha obligado a las compañías de transporte de la Región a efectuar enormes inversiones en naves frigoríficas para manejar tales volúmenes, puesto que el 98% de la exportación se realiza por carretera. La verdura congelada que más se envía desde Murcia es el brócoli, seguida por pimiento, coliflor, cebolla, zanahoria y calabacín.
En enero de este año, las ventas murcianas al extranjero totalizaron 14.422 toneladas (+21,4%) y 16.570.318 euros de facturación (+14,3%), de acuerdo con los últimos datos del Instituto de Comercio Exterior (Icex). Las ventas aumentaron en Reino Unido -Flandes y Murcia son los mayores suministradores europeos de dicho país-, con un 18,3%, y se dispararon en Estados Unidos, con un 500%. En Francia, Alemania y Holanda la demanda se mantiene casi igual.
Pese a este alivio, la búsqueda de nuevos proveedores por parte de las cadenas comerciales de Reino Unido está facilitando el desembarco en Europa de competidores extracomunitarios. La ‘cabeza de playa’ británica va siendo ocupada por exportadores de China, Turquía, Ecuador, Chile e India. Desde allí, dichos países ya dan el salto a Alemania y Holanda, especialmente los del coloso chino. A ello se une la competencia egipcia. El consumo de alcachofa congelada en Europa se ha mantenido estable en los últimos años, pero en la pasada campaña se generó mucho aforo en Egipto, aunque de baja calidad, según la asociación Alcachofa de España.
Y luego está la competencia interna. Así, la industria española de verduras congeladas produjo 774.996 toneladas en 2017, un 13% más que en 2016. Generaron ingresos por valor de 775 millones de euros. «Suponen los mejores datos de los últimos diez años», según José Félix Liberal, presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Verduras Congeladas (Asevec).
El cultivo de brócoli en España sigue manteniendo su liderazgo entre los ultracongelados. «La demanda de esta verdura proviene especialmente del extranjero, ya que en España el consumo sigue siendo bajo», apunta Félix Liberal. En 2017 se exportó el 85% de la producción de esta verdura. Tanto esta hortaliza como pimientos y guisantes suponen el 61% de la producción nacional. Les siguen judías verdes, espinacas, zanahorias, coliflores y cebollas.
Las principales regiones donde se cultivan verduras destinadas a la industria de ultracongelados son Navarra (301.801 toneladas, el 38% de la producción nacional) y Murcia (234.816 toneladas, con el 29%). Tras ambas regiones se sitúan Castilla y León, La Rioja, Extremadura, Castilla-La Mancha, Aragón y Andalucía. La superficie total en España dedicada a ello supera las 40.000 hectáreas.
La industria española de verduras congeladas es la segunda más importante del continente, después de la belga, y los índices de exportación corroboran la buena situación que atraviesan tales productos. El pasado año se exportó el 64% de los vegetales congelados, 497.623 toneladas, un 7% más que en 2016. Los principales mercados son Francia, Alemania, Reino Unido, Bélgica, Portugal, Italia y Países Bajos. Fuera de Europa, destacan Estados Unidos, Brasil, Canadá y Arabia Saudí.
En cuando a empresas, dentro de la Región destaca Fruveco, que ha culminado en Alhama una inversión superior a los 80 millones. Su objetivo es doblar la actual capacidad frigorífica para acometer su expansión internacional. Otras firmas importantes son Congelados Elite, Ultracongelados Azarbe -del Grupo Virto, interproveedor de Mercadona- y Congelados Pedáneo. Dentro de la logística, el ‘podium’ lo ocupa Gestockal, que tiene en el polígono Las Salinas de Alhama uno de los mayores centros de distribución de alimentos congelados del Levante español.
La patronal Asevec destaca que, en la gran mayoría de las ocasiones, los vegetales ultracongelados contienen más vitaminas y minerales, al ser procesados en el momento de su recolección sin recibir conservantes, ni aditivos ni sal.
El menor coste de éstos respecto a las hortalizas frescas tiene una sencilla explicación, según Asevec. Los vegetales que sirven de materia prima se compran en los momentos de mayor abundancia, cuando su valor es tan bajo como para compensar el gasto en el proceso de congelación. De ese modo, se ejerce cierto control sobre los excedentes.