Derivado de diversos análisis, por parte de la autoridad y de manera privada por las empresas, se ha considerado la importancia del manejo de un Modelo de Mejores Prácticas de Comercio Exterior. ¿De qué manera? Integrando a la Cadena de Suministros, de manera natural, los elementos que brinden a la Organización la seguridad, la certeza y la información necesarias para la toma de decisiones que impacten de manera positiva en su desempeño, a través de la medición adecuada de los indicadores y basados en un análisis de riegos que permita mitigarlos a su máxima expresión o, en el mejor de los casos, transferir el impacto que pueda producir un riego y estratégicamente convertirlo en una ventaja a favor de todas sus partes interesadas.
Una óptima Dirección Estratégica basa los objetivos, indicadores y metas en materia de Comercio Exterior, en construir la planeación realizando diversos análisis previos donde debemos considerar quiénes son los actores y/o eslabones importantes en la cadena de suministros e incorporarlos como partes interesadas; existen diversos ejemplos de dichos análisis que brindan valor agregado y que hemos obviado o subestimado su utilización, como el FODA y del Análisis del Entorno, mismos que pueden ser sumamente básicos permitiendo su entendimiento para plasmar sus actividades, o tan analíticos como lo requiera la estrategia de la organización con datos cuantitativos que permitan la implementación de estadística, es decir, identificar partes interesadas, índices de operación, métricos de despacho, métricos de anticipación, métricos de planeación de abastecimiento, modelos de Demand Driven, etc., que aporten valor al proceso de Comercio Exterior, determinando como fortalecen a nuestra producción.
¿Por qué o para qué analizar los riesgos y su impacto en los diferentes procesos, ya sea estratégicos, principales o de apoyo? Un ejemplo del impacto que tienen las operaciones de Comercio Exterior en la Organización, es el costo por precios de incumplimiento (PDI), al no cumplir con permiso, regulación o restricción no arancelaria de importación, los costos derivados del desconocimiento en la materia producen el pago de almacenajes en una terminal de puerto o almacén fiscal o fiscalizado, las demoras de contenedor (costo diario de la renta de un contenedor, posterior a los días libres otorgados por la naviera), los costos por falta de inventario, el paro de una línea de producción o tener que realizar un vuelo chárter para evitar dicho paro de línea; son tan sólo algunos de los escenarios que se pierden de vista al no integrar la importancia de las operaciones de Comercio Exterior al plan estratégico de la organización.
Lo anterior trae consigo un impacto negativo en las finanzas, la operación, los resultados esperados y el prestigio de la misma.
Es por ello que hemos mejorado el Modelo integrando a la planeación estratégica cinco momentos importantes:
1. Planeación estratégica y de abastecimiento
Integra todos aquellos productos y servicios necesarios para el producto final, involucrando a las partes interesadas en materia de Comercio Exterior:
- Anticipación suficiente para su integración en la producción.
- Anticipación ante impacto por indicadores financieros.
- Anticipación en la adquisición de equipos y servicios para la producción.
- Anticipación en la clasificación arancelaria de mercancías.
- Anticipación en la determinación de las RRNNA´s.
2. Integrar las partes interesadas al análisis FODA y al análisis del entorno
- Conocer sus necesidades y expectativas.
- Conocer la manera en que fortalecen los procesos de la organización.
- Analizar los riesgos que asumo, transfiero, mitigo o eliminó a través de ellas.
- Identificar los requisitos de cumplimiento para las partes interesadas. (Compliance de Comercio Exterior).
3. Release / Surtido de insumos de Comercio Exterior
- Planeación logística para la entrega en tiempo de materias primas de elaboración.
- Planeación arancelaria y de despacho de mercancías ante Aduanas.
- Planes de contingencia ante escenarios de riesgo derivados de la operación o por eventos de la naturaleza.
- Selección de proveedores de servicios de Comercio Exterior.
- Bases para licitaciones y concursos.
- Determinación de precios estándar.
- Determinación de tiempo estándar de entrega.
- Criterios de aceptación y rechazo.
4. Modelo de Auditoría Interna
- Revisiones periódicas de Cumplimiento normativo.
- Revisiones periódicas del principio de cuentas claras.
- Modelos auditoría de Tecnologías de Información.
- Auditorías Internas de Comercio Exterior.
5. Integración de herramientas tecnológicas para Comercio Exterior
- Integración de ERP’s.
- Integración de Web services con partes interesadas.
- Análisis y minería de datos de Comercio Exterior.
Uno de los principales retos que se presentan para una organización que realiza operaciones de Comercio Exterior es el cumplimento a las Regulaciones y Restricciones No Arancelarias (RRNA’s), mismas que representan el porcentaje más alto de incidencias que generan precios de incumplimiento (PDI’s) a las Empresas, debido a la falta de planeación y anticipación, así como los cambios en las Legislación y Normativa en materia de Comercio Exterior.
Sin embargo, el Modelo de Mejores Prácticas que se ha mejorado, provee elementos para mitigar o evitar el impacto por el incumplimiento a las RRNA’s y otros eventos que pongan en riesgo la integridad de la Empresa.
En suma, las operaciones de Comercio Exterior deben estar presentes desde la Planeación Estratégica y de Abastecimiento conociendo los insumos, servicios, costos de elaboración, transformación o modificación, los permisos y otros elementos de cumplimiento en materia de Comercio Exterior requeridos.
Todo descansa en una adecuada anticipación, la integración y la colaboración de las partes interesadas involucradas en la Cadena de Suministros de Comercio Exterior, mitigando el impacto que puede producirse en lo financiero, operativo, de prestigio y los resultados esperados, sin perder de vista el enfoque de Comercio Exterior.
Es cada vez más necesario tener control de las operaciones de Comercio Exterior, conocer su impacto, los actores principales, los riesgos inherentes, los beneficios que trae consigo integrarlas a la planeación estratégica de la organización, su análisis en el Consejo de Administración, así como la integración de Consejeros Independientes que cuenten con conocimientos y experiencia en la materia.
Hoy es una realidad, las Mejores Prácticas Corporativas son el diferenciador más importante, incluso, la Autoridad Aduanera ya lo integra dentro de la Ley Aduanera y sus Anteproyectos de Reforma, por lo que resulta indispensable generar los cambios o adecuaciones para su cumplimiento.
*Fuente: http://t21.com.mx/
Autor: Marcelo Escalan
