- Este es un caso de éxito si se compara con la industria de la construcción que no ha logrado levantar el crecimiento después de la crisis sanitaria.
- Pero el SAT asegura que los sectores dentro de la industria automotriz pagan una tasa efectiva de apenas 1.39%, por lo que promete modificar beneficios fiscales.
La pandemia tuvo un impacto en los ingresos de empresas y por lo tanto en la recaudación de impuestos. Pero existen casos, como la industria automotriz, que han logrado salir de la crisis económica. Sin embargo, pagan una tasa efectiva de impuestos inferior a 5% en la mayoría de los apartados que la componen, de acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Esta industria ha logrado remontar a los niveles observados antes de la crisis de 2020, a diferencia de otras actividades económicas. En abril, registró exportaciones por encima de 12,000 millones de dólares, según datos de la balanza comercial. Esto es un nivel que se compara favorablemente con lo que enviaba antes de la pandemia. Al compararse con el cierre sanitario del año pasado, aumentó 372% sus exportaciones con respecto a abril de 2020.
Estos datos contrastan con otras industrias. Por ejemplo, la construcción se ha mantenido estancada desde el año pasado. Es una de las actividades con más impacto en la economía por su uso intensivo de materiales, así como de mano de obra. Pero en abril, retrocedió 1.8% con respecto al mes anterior. Y aunque registró un crecimiento anual de 1.2%, ha mantenido una clara tendencia a la baja desde el inicio de este sexenio, situación que tocó fondo durante la pandemia.
En este contexto, según datos de la propia autoridad tributaria, existen actividades dentro de la industria automotriz que pagan una tasa efectiva de impuestos de apenas 1%, como es el caso de la venta de automóviles nuevos al consumidor. El sector relacionado con la fabricación o ensamblaje de automóviles y camionetas paga 1.4%. En tanto que la fabricación de camiones y tractocamiones paga solamente 1.7%. Solo el apartado de ‘otras partes para vehículos automotrices’ paga una tasa efectiva de casi 5%.
Por lo tanto, Raquel Buenrostro, jefa del SAT, tiene en la mira a la industria automotriz para aumentar la recaudación con cambios a los beneficios fiscales que se le otorgan, de acuerdo con una entrevista para El Economista. Prometió que se revisarán los incentivos que se otorgan.
Esta es una política en alineada con la estrategia anunciada recientemente de aumentar la recaudación entre los grandes contribuyentes. En este segmento, se paga una tasa efectiva de 1.3%, y en algunos casos es negativo. Es decir, las grandes empresas logran obtener devoluciones en lugar de pagar un gravamen.
Manuel Valencia, director de entrada de las carreras de negocios en ITESM Santa Fe recordó que hay una tendencia global para aumentar los impuestos. El especialista en comercio internacional, comentó en entrevista que Estados Unidos está liderando este esfuerzo para cobrar más a los grandes contribuyentes.
«Cuanto el grupo de las 7 economías más importante (G7) empieza a reconocer que los países deben cobrar más impuestos a las grandes empresas tecnológicas que tributan poco, existe un genuino interés por ser mucho más eficiente», indicó en entrevista.
Valencia advirtió que el SAT debería retirar incentivos de manera paulatina. Pero orientarlos al crecimiento de la industria, el pago de mejores salarios e impulsar a la nueva tecnología de autos eléctricos. Esto en línea con los compromisos de México inscritos en el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá (TMEC).
Fuente:
César Barbosa-https://businessinsider.mx/industria-automotriz-caso-exito-recuperacion-pospandemia-ahora-sat-tiene-en-la-mira/