Las importaciones colombianas de moda cierran el primer tramo del año al alza. Después de caer a doble dígito en febrero, las compras en el extranjero volvieron a tomar impulso en marzo para finalizar el primer trimestre en positivo.
Según datos de Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) de Colombia, entre enero y marzo, las importaciones de moda fueron de 519,4 millones de dólares, lo que supuso un incremento del 5,5% respecto al mismo periodo del año anterior.
La subida más pronunciada fue la de marzo, cuando las importaciones colombianas de moda escalaron un 10,4%, hasta 177,2 millones de dólares. Le siguió enero, con un incremento interanual del 8,3%, mientras que en febrero, las compras en el extranjero se redujeron un 12,5% respecto al mismo mes del año anterior.
En el acumulado del año, una sola categoría de la moda colombiana mantuvo a la baja sus importaciones. El sector del cuero y la piel redujo un 4,8% sus compras en el extranjero, hasta 105 millones de dólares.
En contraste, la confección fue el subsector que más disparó sus importaciones en el primer trimestre, con un aumento interanual del 21,1%, hasta 146,7 millones de dólares.
Por último, las compras de productos textiles se situaron en 267,6 millones de dólares entre enero y marzo, un 2,7% más que en el mismo periodo del año anterior.
Teniendo en cuenta grupos más concretos de la moda colombiana, el que más elevó sus importaciones fue el de la confección de prendas de vestir, con un alza interanual del 22,3%, hasta 129,8 millones de dólares. En cambio, la fabricación de artículos de piel desplomó sus compras fuera de Colombia hasta 30.000 dólares, un 47% menos que el primero trimestre de 2017.
Además de crecer en valor, las importaciones colombianas de moda también se elevaron en volumen durante el periodo comprendido entre enero y marzo. En el primer trimestre, las compras fueron de 82.573 toneladas, un 3,1% más que el mismo periodo del año anterior.
En este sentido, la confección lideró también la subida de las importaciones por volumen, con un avance del 34,3%, hasta 6.257 toneladas, a pesar de ser la de menor peso en la balanza comercial. En cambio, las compras de cuero, calzado y marroquinería se mantuvieron estables en el primer trimestre.