Agregó que dicho sector representa el tipo de comercio más importante en América del Norte, pues México importa de EE.UU. el 54 por ciento del material utilizado en la manufactura de vehículos.
Eduardo Solís, presidente de la AMIA, indicó que México también vende autopartes a Canadá, adonde envía cerca del 13 por ciento de lo manufacturado, por lo que dijo que esta “industria en Norteamérica es mutuamente necesaria para los tres países, de otra forma los autos son incomprables”.
Por su parte, Oscar Albín, presidente de Industria Nacional de Autopartes (INA), señaló que la industria de autopartes en México sigue su ruta sin parar, ya que las inversiones por parte de estas compañías seguirán, además de que las importaciones y exportaciones continúan a su ritmo y se espera en los próximos años el arribo de cien o 120 empresas.
Añadió que de estas empresas, alrededor de un 75 por ciento son de procedencia extranjera, y de esta cifra, un 30 por ciento son de origen estadounidense, mientras que el resto son japonesas, canadienses y alemanas, y últimamente un número importante son coreanas.
Estas compañías generan más de 700 mil empleos directos en este país, las cuales el año pasado generaron una facturación de más de 82 mil millones de dólares, y se espera que para el presente año, se tenga un crecimiento en este rubro de 2.0 por ciento o más.
Así, se espera lleguen más empresas de autopartes, a efecto de proveer a los nuevos fabricantes de vehículos en México como Kia y Hyundai, así como de Infiniti y Mercedes Benz; sin dejar de tomar en cuenta a las otras factorías de Audi y BMW que ya producen y que eventualmente producirán más.
“En relación al presente escenario con el presidente de Estados Unidos, las posturas respecto al Tratado de Libre Comercio son irreales, desde el punto de vista comercial. Así es que hasta que no se sepa qué va a suceder realmente, no se puede emitir ningún comentario, porque además no hay interlocutores de ambos países que estén sentados para abordar el tema”, expresó Albín.
Dentro de este escenario, dijo, “la buena noticia es que el mercado de vehículos nuevos de Estados Unidos, sigue fuerte, el cual requiere ser atendido y México es un buen proveedor”, apuntó.