Lo que queremos es que se apruebe, pero con el tratado correcto. Nuestra preocupación es dejar muy claro y cerrar filas con el gobierno mexicano que esto no es a cuesta de lo que sea y que hay muchas cosas que son totalmente inaceptables”, agregó el integrante del Cuarto de Junto y coordinador del Consejo Consultivo Estratégico de Negociaciones Internacionales del Consejo Coordinador Empresarial (CCENI).
Jesús Seade , subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), se reunió con el sector empresarial mexicano a su regreso de Estados Unidos, donde recibió un documento con peticiones para modificar algunos puntos del T-MEC firmado por los tres gobiernos en noviembre de 2018 en Argentina.“No estábamos esperando que esto llegara con propuestas tan extremas. Entonces, estamos dispuestos a sentarnos a acomodar ciertos valores, ciertas cosas, en algunos de los temas”, dijo Kalach.
“Llevamos los tres últimos días haciendo un análisis muy detallado, desde que regresó el subsecretario Seade con el texto, de cuáles eran las cosas aceptables y cuáles no. Hemos dedicado, con todo el equipo técnico de Cuarto de Junto, muchas horas de trabajo”, agregó.
“En el sector privado cerramos filas con el gobierno mexicano, dándole soporte al subsecretario Seade para asegurarnos que esto llegue a buen puerto”, sostuvo el negociador.
En ese sentido, desde la iniciativa privada señalaron al subsecretario Seade los puntos que, consideran, pueden enriquecer el acuerdo comercial y de aquellos que consideran “totalmente inaceptables”, pues vulneran la soberanía del país.
Sin ahondar en detalles de lo que en la iniciativa privada no está dispuesta a negociar porque podría ser “contraproducente contra la negociación misma”, Kalach comentó que, “por ejemplo”, Estados Unidos busca enviar inspectores extranjeros para verificar el cumplimiento de la ley laboral en México.
“El cumplimiento de las leyes laborales en México se hace valer por el gobierno mexicano”, sostuvo.
Entre los puntos que han visto positivos para negociar, añadió el integrante de Cuarto de Junto, uno tiene que ver con corregir el proceso administrativo para que los paneles de solución de controversias se puedan implementar.
“Ese es un ejemplo de algo positivo que estamos dispuestos cambiar, que beneficia a los tres países y que hace un mejor tratado en general. Lo que no estamos dispuestos es en aquellos que nos quieran pasar un costo adicional”, insistió.
Al preguntar sobre fondos para implementar los cambios que pide EU en el acuerdo comercial, Kalach explicó que este tema no se ha abordado. Solo se habló del financiamiento para el Banco de Desarrollo de América del Norte (NAF Bank), banco de desarrollo cuya idea viene desde el NAFTA original. “nada más hay un compromiso de proveerle recursos, pero fuera de eso no hemos hablado de un tema de fondeo”, dijo.
“Sabemos que el gobierno mexicano ha transparentado el presupuesto para la implementación de la nueva reforma laboral, pero ese fue un tema totalmente mexicano, fue compartir con nuestros socios comerciales la estructura del presupuesto interno”, explicó.
México sí quiere acuerdo comercial
“Lo que tenemos claro es que sí queremos el tratado, queremos permanecer como parte de este grupo de América del Norte, creo que lo hemos demostrado y hemos hecho todo lo que a nuestros país se ha solicitado para permanecer en este club, pero tampoco es a cualquier costo”, apuntó Kalach.
“Estamos sentados en la mesa, queremos negociar, estamos dispuestos a ceder en algunas cosas que hagan sentido para los tres países, pero no nos pasen el costo de las diferencias que hay con el Partido Demócrata”, añadió.
“Ya tienen nuestras posiciones. Vamos a hacer esto que sea un beneficio para los tres países y no nos pidan cosas que nos puedan pasar costos como falta de competitividad en los siguientes años para nuestro país”, dijo el empresario.
Ruido electoral
Ratificar el nuevo acuerdo comercial de América del Norte este año es para evitar que las campañas presidenciales en Estados Unidos metan “ruido” en la cuestión comercial. Sin embargo, están dispuestos a esperar si es que el proceso de aprobación por parte del Congreso Estadounidense se extiende más allá de 2019.
“No olvidemos que tenemos el NAFTA original vigente y, si nos vamos al año que entra, ni modo. El capital político que se le ha invertido a este tratado comercial, especialmente en la Casa Blanca, y si Estados Unidos no está dispuesto a poner de acuerdo ese capital político en casa, con los demócratas, no vamos a aceptar un costo adicional por esas diferencias”, aseguró el coordinador del CCENI.
“Parte del incentivo de poder ratificar esto antes del año que entra es que no se genere aún más ruido por el tema de la elección. Por más que hemos tratado de huir de él, el tema político se sigue metiendo y hemos tenido elecciones no solamente en nuestro país, una muy importante donde hubo cambio de régimen y un cambio de visión del país muy importante, pero también la elección en Estados Unidos y recientemente hubo elecciones en Canadá”, agregó.
¿Y Canadá?
Esta parte del proceso de negociación se ha llevado de manera bilateral entre México y Estados Unidos, sin embargo, en Canadá están a favor del T-MEC.
“Canadá, en general, está muy alineado a los ideales que hemos tenido tanto en México como en Estados Unidos y lo que se resuelva, van a aceptar. Ellos quieren ratificar este tratado lo más pronto posible y, en general, no ha sido un conflicto porque tanto el primer ministro, (Justin) Trudeau y su partido, así como el partido de oposición están a favor del tratado”, concluyó Moisés Kalach.
*Fuente:http://www.portum.mx/