vMéxico otorgó cupos a la importación de diversos productos lácteos como parte de la actualización del Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea (TLCUEM), cuyas negociaciones se cerraron el año pasado y está en espera de ser firmado y, en su caso, ratificado.
Los cupos corresponden a leche y nata, sin concentrar o con adición de azúcar u otro edulcorante; leche en polvo; leche evaporada y condensada; mantequilla y otras grasas y aceites derivados de la leche, y productos lácteos para untar; queso fresco, rallado o en polvo y procesado, y otros quesos.
En las negociaciones para actualizar este acuerdo comercial, México pactó el establecimiento de cupos, no una apertura total, por tratarse de productos “sensibles”.
De ese modo, México aceptó el establecimiento de un cupo de leche y nata, sin concentrar o con adición de azúcar u otro edulcorante, que inicia el primer año con 100,000 litros, para luego crecer gradualmente hasta los 200,000 litros anuales a partir del quinto año de la entrada en vigor del TLCUEM 2.0.
Otro contingente arancelario se fijó para la leche en polvo, libre de aranceles, comenzando con 30,000 toneladas en el primer año y, tras un alza progresiva, topando con 50,000 toneladas a partir del año cinco.
Para los cupos de leche condensada y evaporada se convinieron volúmenes por 200 toneladas a partir del primer año; de mantequilla y otras grasas y aceites derivados de la leche, y productos lácteos para untar por 1,500 toneladas iniciales y 2,500 toneladas a partir del séptimo año; y queso fresco, rallado o en polvo y procesado por 2,500 toneladas en el primer año y 5,000 toneladas a partir del año cinco.
México es el quinto mayor importador mundial de productos lácteos en términos de valor, mientras que los Estados Unidos son, con mucho, el mayor proveedor de productos lácteos a México, abarcando 77% del total de este tipo de compras externas mexicanas.
Las importaciones de productos lácteos son vitales para México porque es un productor deficitario. La producción de leche en México no satisface la demanda del sector de procesamiento de leche de alta calidad y está acotada por limitaciones de la cadena de frío en varios subsectores. Con el nuevo TLCUEM, para 98% de los bienes no habrá derechos desde el momento en que el acuerdo entre en vigencia. Para los demás artículos, los aranceles se eliminarán a lo largo del tiempo o por un monto limitado definido como cupo. Esto incluye las exportaciones de lácteos y carne de la Unión Europea y México.
El bloque comunitario se ubica como el tercer mayor socio comercial de México, quien es, a su vez, el segundo mayor socio comercial de la Unión Europea en América Latina, después de Brasil. Uno más de los cupos, correspondiente a “otros quesos”, iniciará con un volumen de 6,000 toneladas y escalará hasta ubicarse en forma sostenida en 20,000 toneladas.