Ciudad de México.- Cuando todo parecía que las cosas entre los socios del ahora Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá (USMCA) tomaban un curso más amigable y la disputa arancelaria podría llegar a su fin, la realidad es que no solo continúan sino que han empeorado.
Esto luego de Canadá anunció aranceles a siete productos derivados del acero a prácticamente todos los países del mundo, menos a Estados Unidos, Chile e Israel, lo que motivó malestar y disgusto en el gobierno mexicano.
Según, Ildefonso Guajardo, secretario de Economía, las ventas mexicanas de acero a Canadá se basan principalmente en tubos para sector energía y alambrón y “es una cantidad importante”, ya que “representan casi el 20 por ciento de lo que exportamos a Estados Unidos y al resto del mundo”.
Además agregó: “La decisión de los canadienses afecta la integración regional de la industria del acero en América del Norte”.
Las opciones de México
Dado que Canadá no pretende sacar a México de la lista de países afectados por estos impuestos, el gobierno de nuestro país ya tiene contemplado dos caminos para buscar una solución a este conflicto comercial.
Uno de ellos es el diálogo y según fuente del gobierno canadiense, Guajardo ya contactó a la ministra de Relaciones Exteriores, Chrystia Freeland, para hablar sobre este tema, aunque no hay una versión oficial sobre cómo van las negociaciones.
Por otra parte, en caso que la vía diplomática no funciones, Rogelio Garza, subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía, aseguró que ya contemplan imponer por primera en la historia aranceles a productos canadienses.
En este escenario, México informó que podría imponer represalias comerciales contra Canadá por 212 millones de dólares en respuesta a la salvaguarda, que sería una cifra equivalente a los daños económicos que provocaría a la industria nacional.
Según Garza, esto podría suceder incluso antes de que concluya el periodo preliminar de la medida, entrará en vigor a partir del próximo 25 de octubre y durará preliminarmente 200 días, tiempo en el cual el gobierno canadiense estudiará esta medida y sus beneficios a la industria de su país.
¿Conviene a México imponer medidas espejo a Canadá?
Pero en el caso de que México impusiera aranceles a importaciones canadienses, estos se centrarían en productos “donde no se vean afectadas las cadenas globales de suministro”, explicó Enrique Zavala, director de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (Anierm).
En declaraciones para Expansión, el experto asegura que estos podrían ser “las semillas de nabo (el producto agroalimentario más importado de Canadá), las cuales se utilizan para la fabricación de aceites comestibles; trigo, madera, muebles de madera y miel de maple”.
Sin embargo, “aplicar aranceles en estos bienes no sería conveniente para la economía mexicana, para el productor, ni para el consumidor final”, explicó Zavala y agregó que México “debe ser muy cuidadoso, pues puede darse un balazo en el pie” con estas medidas comerciales.