“Se está esperando para la próxima (ronda de negociaciones), la que va a ser ahora en febrero”, dijo Garza al ser consultado sobre cuándo los negociadores presentarán la propuesta mexicana.
“(El contenido regional se puede mover) muy poco. La regla que tenemos tiene un equilibrio en costos y todo para la fabricación y el mover mucho esa regla significará cambios fuertes en los costos”, refirió el funcionario. “No es que no se pueda mover, (se puede) pero poco”, agregó.
El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, dijo a fines de enero que México estaba abierto a considerar cambios en las reglas de origen para autos, a pesar de que la industria local —representada por Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA)— expresó su deseo de mantener el actual requisito regional.
Bajo el acuerdo, al menos 62.5% de las partes de un automóvil o un camión ligero debe originarse en Estados Unidos, Canadá o México para evitar aranceles, pero la administración de Trump pretende que el umbral se eleve a 85% y que la mitad del contenido sea hecho en Estados Unidos.
En la sexta ronda de conversaciones del TLCAN, que culminó a fines de enero en Montreal, Estados Unidos rechazó las propuestas de Canadá para incluir los gastos de ingeniería, investigación, desarrollo y otras tareas de alto valor en las metas de mayor contenido norteamericano, con las que buscaba proteger empleos bien remunerados en la región.