Resaltaron que no es posible calificar a la actividad de tercerización como organización criminal, pues desde 2012 se trabaja bajo disposiciones reguladas.
Claudio Méjan considera que esta actividad (outsourcing) lejos de ser negativa permite que las startups se enfoquen en la venta de sus productos o servicios, mientras que otro organismo especializado los apoya en temas jurídicos, fiscales y laborales.
Para el representante de INDEX, el mundo globalizado requiere diversidad y flexibilidad para adaptarse a las tendencias que están presentándose, y señaló:
“Si México no camina al ritmo que exige el comercio, la tecnología y la competencia, sencillamente se quedará atrás”.
Hamlet González destacó que en la iniciativa del exlíder minero se mezclan leyes que afectan en materia fiscal, penal y delincuencia organizada, por lo que la cataloga como carente de técnica legislativa.
Los especialistas coincidieron en que no es viable desaparecer la figura de outsourcing, más bien, se necesita regular para que cumpla con las necesidades de las empresas y con las estipulaciones legales.
*Fuente: https://mundoejecutivo.com.mx/