Si los precios de $100 y $120 caen, amarran la flota
PROGRESO.— A dos semanas que se inició la temporada de pesca de mero 2020-2021 y a un mes que la pandemia de Covid-19 llegó a Yucatán, en alta mar hay 163 barcos de Yucalpetén en los que laboran unos 1,100 pescadores que recibieron anticipos antes de zarpar.
Enrique Sánchez Sánchez, delegado de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera y Acuícola (Canainpesca) en Yucatán, informó que del 1 de abril a la fecha ya zarparon 163 embarcaciones mayores de varias empresas, cuyos dueños en un esfuerzo para apoyar a los hombres de mar destinaron recursos para avituallarlas y pagarles anticipos a fin de que vayan a pescar mero.
La flota de la pesquería de especies de escama consta de unas 550 embarcaciones, pero solo el 30% trabaja.
La mayoría está amarrada en los muelles de Yucalpetén desde el 1 de febrero, cuando se inició la veda de dos meses de mero.
Sánchez Sánchez señaló que los barcos retornarán del primer viaje del mero a partir de este fin de semana.
Agregó que los reportes son que hay regular captura de mero, pero cuando arribe cada embarcación se sabrá con certeza cuánto trae.
Dijo que dos barcos que retornaron por fallas mecánicas trajeron en promedio 1,500 kilos de mero de buen tamaño, cada uno, pues la pesca se realiza lejos de la costa con el fin de capturar ejemplares grandes.
Según el dirigente empresarial, varios dueños de barcos enviaron sus embarcaciones a la captura de mero, pues decenas de pescadores estaban desesperados por trabajar, pues eso representaba recibir anticipos y tener dinero para sus familias.
Sostuvo que por ello, los armadores con recursos propios avituallaron las embarcaciones con riesgo de no recuperar la inversión.
Reiteró que por la pandemia de Covid-19, los mercados siguen desplomados, no hay exportaciones y los precios igual cayeron.
El kilo de mero rojo se cotiza a $100 y el de negrillo, a $120, y es probable que cuando retornen todos los barcos se desplomen aún más los precios.
Recordó que hasta fines de enero, cuando no había veda y aún no cerraban los mercados por el Covid-19, el kilo de mero rojo se pagó a $180 y el de negrillo, hasta $220.
Pero conforme el coronavirus se extendió, se pararon las exportaciones, no hay ventas en el extranjero, insistió, así que cuando arriben los barcos se presentará el problema de la venta, y los precios estarán bajos.
“Si los precios y volúmenes de captura son bajos, es probable que no salgan los gastos de operación y haya pérdidas que tendrán que absorber los armadores porque el pescador no pierde, pues antes de salir de viaje recibieron sus anticipos de pesca; si eso ocurre los barcos serían amarrados en los muelles pesqueros y la situación del sector pesquero se complicará aún más”, remarcó el delegado.— Gabino Tzec Valle
Impacto de la cuarentena
Enrique Sánchez Sánchez, delegado de la Canainpesca en Yucatán, dijo que la industria pesquera es de las golpeadas por la pandemia del coronavirus, los países que son los principales clientes, como Estados Unidos, Italia, España y Japón, no están importando productos pesqueros, pues en esas naciones los restaurantes y las plazas de diversiones están cerrados, no hay ventas.
Pagos empresariales
Otra situación que afecta al sector pesquero, señaló Sánchez Sánchez, es la falta de apoyos del gobierno federal, están atrasados, lo que causa más daño que el virus de la pandemia, porque las plantas procesadoras requieren de recursos para sostener la plantilla laboral, pago de energía eléctrica y otros compromisos que tienen que hacer para que las empresas no cierren.