En esta cuarta reunión, los gobernadores de los Estados participantes, Francisco Domínguez Servién, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, Juan Manuel Carreras López, Martín Orozco Sandoval y Enrique Alfaro Ramírez explicaron que esta alianza generará oportunidades de trabajo y colaboración, las cuales esperan se replique en otras partes del país.
Durante el encuentro se dio a conocer que Jalisco también formará parte de las mesas de trabajo para elaborar la agenda estratégica de la Alianza Centro-Occidente.
Hasta ahora, la estrategia de la Alianza busca posicionar a la región como la más competitiva de América Latina, ser un centro de logística en el país y dar pie al desarrollo humano y el bienestar social, expresó Eduardo Sojo Garza, director general del Laboratorio Nacional de Políticas Públicas del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE).
Para ello, buscarán la creación de una Secretaría Técnica a través de la cual se coordinarán los proyectos de Desarrollo Regional, un Fideicomiso de Desarrollo Regional y una Agencia de Desarrollo Regional.
Asimismo, dio a conocer que la economía del Bajío reporta un crecimiento anual de 4.9% y se ha posicionado a nivel internacional de forma positiva, pues hoy concentra el 18% del total de inversión extranjera directa del país y el 15% de las exportaciones, a pesar de que concentra solo el 10% de la población.
Este proyecto surgió a partir del acuerdo de San Miguel de Allende, en Guanajuato, firmado en noviembre del 2018, y hoy se integra el estado de Jalisco, lo que representa más de 20.45 millones de mexicanos que generan un Producto Interno Bruto de 90 mil millones de dólares y se espera un crecimiento del 4.5%, mencionó el gobernador del estado de Querétaro, Francisco Domínguez Servién.
Los gobernadores reiteraron su compromiso para trabajar en una agenda común y generar una visión regional en materia económica donde los cinco Estados puedan complementarse y den continuidad al intercambio comercial que ya existe.
Finalmente, el proyecto fue presentado a empresarios de la zona en la Hacienda de Viborillas, en el municipio de Colón. Asistieron también los secretarios de Desarrollo Sustentable de Querétaro, Marco del Prete Tercer; de Desarrollo Económico Sustentable de Guanajuato, Mauricio Usabiaga Díaz Barriga; de Desarrollo Económico de Aguascalientes, Luis Ricardo Martínez Castañeda, y de San Luis Potosí, Gustavo Puente Orozco.
REGIÓN QUE CONTINÚA EN CRECIMIENTO
Actualmente, la región Centro-Bajío está compuesta por los estados de Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro y San Luis Potosí, la cual concentra al 10% de la población del país, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Población de 2018.
Hasta 2017 generó 10.3% del Producto Interno Bruto (PIB) no petrolero en todo el país, tan solo superada por la Ciudad de México. Del mismo modo, ocupó el segundo lugar de crecimiento económico promedio anual en el periodo 2010-2017 con un 4.8 por ciento.
El Centro Bajío es sumamente atractivo para las inversiones y ello ha permitido la instalación de diferentes clústers. Los de mayor producción brutal son el automotriz, la elaboración y procesamiento de alimentos, la producción y transporte de gas y petróleo, así como los productos químicos, plásticos, calzado, papel y embalaje, distribución y comercio electrónico y logística.
Con todos estos datos, la Alianza Bajío Occidente, que recién incorpora al estado de Jalisco, elaboró una agenda para hacer frente a la falta e planeación a largo plazo con participación ciudadana, dando prioridad a las problemáticas que tienen que ver con la falta de una estrategia en materia de sustentabilidad ambiental regional, la alta dependencia económica y legal del Gobierno Federal, y la insuficiente formación educativa.
Para ello, propone como estrategias posicionar a la región a nivel global como una de las más atractivas, potenciar el desarrollo humano y el bienestar social y convertir a la educación, ciencia, tecnología e innovación palanca del desarrollo.
De ahí se busca lograr la competitividad más alta en América Latina, ser el centro logístico del país, consolidar el Estado de Derecho y garantizar la seguridad, así como fortalecer el federalismo a través del desarrollo regional. Finalmente, proyecta asegurar la disponibilidad energética para el desarrollo de la región y garantizar un desarrollo con sostenibilidad ambiental.