l representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, se reunió esta semana con legisladores demócratas para tratar de resolver sus preocupaciones sobre el acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC) a medida que los republicanos aumentaron la presión para que el acuerdo se apruebe a fines de 2019.
Los demócratas dijeron que estaban progresando todos los días, rechazando las críticas del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y de algunos republicanos que los acusaron de retrasar una votación sobre el acuerdo que reemplaza el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) de la década de 1990.
Lighthizer y otros funcionarios de comercio de Estados Unidos se reunieron el miércoles con un grupo de trabajo de demócratas en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, según tres fuentes familiarizadas con el asunto.
Lighthizer también se reunió con los republicanos en la Comisión de Medios y Arbitrios de la Cámara, dijo una de las fuentes. Además, su personal se reunió con el personal del Congreso el lunes y martes, según dos de las fuentes.
La oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) no hizo comentarios de inmediato.
A pesar de las señales positivas, el presidente de la Comisión de Finanzas del Senado, Chuck Grassley, republicano, dijo en un discurso en el piso del Senado que temía que la Cámara controlada por los demócratas “tenga cada vez menos probabilidades de actuar este año en el T-MEC”.
Dijo que los demócratas parecían estancarse para evitar entregar cualquier victoria al republicano Trump, pero agregó que no actuar podría costarles votos en las elecciones de 2020.
Retrasar una votación sobre el acuerdo podría finalmente descarrilarlo, ya que es probable que se finalice poca legislación en un año de elecciones presidenciales.
Los republicanos argumentan que el pacto comercial crearía cientos de miles de empleos, protegería a las industrias estadounidenses e impulsaría la inversión en los Estados Unidos.
Los demócratas han dicho que están comprometidos a trabajar para lograr la aprobación, pero necesitan que sus preocupaciones sobre el trabajo, el clima y la aplicación de la ley se aborden primero.
*Fuente: https://conexionmigrante.com/
