Ciudad de México. El Congreso de Estados Unidos ya puede iniciar el proceso deliberativo para ratificar o no el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), toda vez que desde el jueves pasado la Comisión de Comercio Internacional de ese país (USITC, por sus siglas en inglés) presentó el reporte sobre el impacto que dicho acuerdo tendrá sobre la economía estadunidense, destacó la Secretaría de Economía (SE).
Tal reporte, difundido ya por la prensa, es uno de los requisitos que el Ejecutivo de ese país debe cumplir, de acuerdo con la Sección 105 (c) de la Ley de Responsabilidad y Responsabilidades Comerciales del Congreso de 2015, también conocida como Autoridad de Promoción Comercial (Trade Promotion Authority, TPA) para que el Congreso comience la deliberación sobre el tema, explicó.
La SE destacó este domingo varios aspectos que contiene el documento que la USITC dio a conocer desde hace tres días, como la reforma laboral en México. Indicó que el documento “estima que como resultado de disposiciones sobre negociaciones colectivas el salario en México podría incrementarse 17.2 por ciento” y se fortalecerán normas y derechos laborales que servirán para promover salarios más elevados y mejores condiciones laborales.
El tratado, sostuvo la secretaría, tendrá un “impacto positivo moderado” en el producto interno bruto (PIB), empleo, salarios, producción y principales industrias de Estados Unidos en un periodo de 6 años de ajustes necesarios tras su entrada en vigor, de acuerdo con el reporte mencionado.
“El TMEC prevé las condiciones y ofrece la certidumbre que requieren los agentes económicos para aprovechar las oportunidades de comercio e inversión en Norteamérica. El TMEC permitirá a las economías de los tres países impulsar un crecimiento económico incluyente que atienda las necesidades de las mayorías y que ofrezca el bienestar que requieren”, según la SE.
Libre comercio automotriz con reglas de origen restrictivas
La dependencia detalló que el reporte analiza los efectos en los sectores automotor, agropecuario, propiedad intelectual, comercio electrónico, laboral, comercio de servicios transfronterizos, libre flujo de datos e inversión de Estados Unidos, pero la USITC “encuentra que los efectos más significativos del TMEC en la economía se relacionan con disposiciones del comercio digital, industrias de servicios y reglas de origen aplicables al sector automotor”.
Sobre la industria automotriz, señaló que la USITC “identifica a México como una plataforma de producción y exportación de vehículos en América del Norte y un mercado importante para las importaciones de autopartes provenientes de Estados Unidos. Los fabricantes de automóviles de América del Norte han creado la cadena de suministro más sofisticada e integrada de cualquier sector manufacturero. De hecho, en 2017, 62 por ciento de las exportaciones del sector automotor de los Estados Unidos se dirigió a Canadá y a México”.
Admitió, no obstante, que aunque el libre comercio automotriz se mantiene para la región la regla de origen es más restrictiva para fomentar la cadena de proveeduría y contribuir al fortalecimiento de la integración productiva, pero la USITC reconoció en su reporte que podría haber un incremento en los costos de producción en la región afectando precios y consumo en Estados Unidos.
La secretaría retomó los cálculos plasmados en el reporte sobre el aumento en el comercio que el tratado provocará entre los tres países aún cuando prácticamente está libre de aranceles desde 1994: se prevé que las exportaciones estadounidenses hacia Canadá aumentarán en 19 mil 100 millones (5.9 por ciento) y hacia México 14 mil 200 millones (6.7 por ciento, mientras que las importaciones estadounidenses de Canadá subirán 19 mil 100 millones (4.8 por ciento) y las provenientes desde México en 12 mil 400 millones (3.8 por ciento), respectivamente.
El año pasado los tres países de América del Norte concentraron 15.6 por ciento del comercio mundial, además de 17.9 por ciento de las importaciones del mundo, es decir 3.56 billones de dólares y 13.2 por ciento de las exportaciones mundiales con 2.56 billones de dólares.
Sin embargo, la SE reconoció que China se mantiene como la primer fuente de importaciones de Estados Unidos, mientras México y Canadá representan la segunda y tercera, con un 26 por ciento en conjunto, en tanto que en las exportaciones estadunidenses los lugares se invierten porque Canadá es primero en la lista, seguido de México, concentrando en conjunto un 34 por ciento de esas ventas.
Refirió que en el comercio de servicios, los 3 socios de América del Norte concentraron 17 por ciento de las exportaciones mundiales y 13 por ciento de las importaciones, pero liderados por Estados Unidos.
Canadá fue el segundo destino de las exportaciones de servicios de Estados Unidos por 58 mil millones de dólares y México el séptimo con 33 mil millones de dólares, que en conjunto equivalen al 11 por ciento del total de las exportaciones de servicios de Estados Unidos. En importaciones de servicios de Estados Unidos, Canadá fue el cuarto proveedor con 33 mil millones de dólares y México el séptimo con 25 mil millones de dólares, lo que nuevamente implica un 11 por ciento del total, con Estados Unidos en una posición superavitaria.