A partir de sus informes de resultados, se sabe que Asia ocupa el primer lugar en exportaciones, seguido de América del Norte y Europa.
Al momento de exportar, se deben considerar los distintos aranceles que existen: Ad valorem, específico y compuesto; que son utilizado por países integrantes de la OMC, incluyendo a México.
Ad valorem (“según el valor”, en latín) se calcula como un porcentaje del valor de lo que se importa, que incluye costo, seguro y flete. Para los fabricantes nacionales, este arancel los protege de los precios cambiantes, no es de extrañar que sea el más utilizado en el mundo. 87% de los aranceles vigentes son de este tipo, requieren de fiscalización y su implementación es subjetiva; lo cual puede ser una desventaja.
El arancel específico es menos común, pero tiene una ventaja importante, es fácil de aplicar y administrar en productos estandarizados y básicos. Se aplica en términos de cargas de lo importado y se grava con un valor fijo monetario; se fija en concordancia con el número de unidades que llegan al país importador y no de acuerdo con el precio o valor de las importaciones. Su desventaja está en que puede debilitar la competitividad de los exportadores y hacer más difícil el acceso a países sin alianzas comerciales.
Finalmente, el compuesto, un arancel que resulta de la combinación de los dos anteriores, el ad valorem y el específico.
¿Conoces cómo se clasifican las importaciones?
Existen una serie de nomenclaturas que ayudan a organizar las mercancías en el comercio internacional, las cuales se identifican a través de seis dígitos según el Sistema Armonizado que entró en vigor en 2017. Está clasificación tiene dos funciones; la primera, como denominación del sistema de clasificación antes mencionado; el segundo, para designar al código utilizado en una operación de importación o de exportación mediante el cual las autoridades, y los usuarios, asignan la tasa porcentual de arancel que se debe pagar, así el cumplimiento de regulaciones no arancelarias (permisos, cuotas compensatorias, regulaciones sanitarias, de etiquetado, etcétera).
Apoyo comercial
Ya que es de suma importancia para un país el comercio exterior, se ha buscado mejorar procedimientos que impulsen las alianzas entre diferentes países. Un gran ejemplo de ellos es la Alianza del Pacífico, cuyo objetivo es permitir el comercio entre México, Chile, Perú y Colombia con la reducción arancelaria de 92% de las 12,000 fracciones de productos que se comercializan entre estos países.