Especial importancia reviste esta edición del Congreso del Comercio Exterior Mexicano que será inaugurado por el Presidente del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE), Lic. Valentín Díez Morodo, pues se realizará en un momento en que la economía mundial y el comercio internacional están sufriendo una serie de convulsiones que naturalmente nos preocupan.
Por eso, el título del Congreso es Innovación y Desafíos para el Crecimiento del Comercio Exterior Mexicano, mismo que se iniciará analizando las Oportunidades y Desafíos que presenta el T-MEC, tema de vital importancia teniendo en cuenta que prácticamente 80% de nuestras exportaciones están dirigidas a Canadá y Estados Unidos; porque 65% de nuestro comercio exterior se realiza con estos países; y porque la renegociación y modernización del TLCAN ha modificado el marco de referencia que regula las relaciones con nuestros socios más cercanos y más importantes, creando condiciones que los exportadores mexicanos deben conocer para aprovechar mejor las oportunidades y enfrentar los retos que generan las nuevas condiciones pactadas.
Dentro de este capítulo, un elemento en el que se centrará la atención corresponde a los Desafíos del Cruce Fronterizo México-Estados Unidos, debido al entorpecimiento que ha sufrido la realización de los trámites de acceso al territorio norteamericano en los dos años más recientes.
En el Congreso se continuará con el análisis de los problemas estructurales que nos afectan, por lo que abordaremos temas como la Innovación, pensando siempre en el desarrollo de una industria del futuro que incida positivamente en otro tema fundamental que es la incorporación de mayor Valor Agregado como Impulso a la Internacionalización de las PYMES y la Competitividad.
Otro tema de especial importancia del comercio exterior mexicano es la Diversificación Geográfica de nuestras exportaciones, por lo que adicional a la revisión del T-MEC, analizaremos el resto de los mercados incluyendo de forma prioritaria a la Unión Europea, bloque que se constituye en el segundo socio comercial y generador de inversión extranjera hacia nuestro país, y con quien recientemente terminamos la revisión y modernización del Tratado que habíamos firmado en el año 2000.
También revisaremos nuestra relación con el TTP-11, acuerdo que prácticamente entró en vigor el primero de enero de este año y con el cual la relación comercial ha adquirido un dinamismo extraordinario en los años más recientes.
Asimismo, veremos nuestra relación con la Alianza del Pacífico, que podríamos considerar de reciente creación y con quien hemos definido un esquema de colaboración muy preciso que tiene como objetivo una integración profunda y una estrategia conjunta orientada a los mercados asiáticos.
Independientemente de estas revisiones puntuales, es importante señalar que revisaremos a los otros países con los que no tenemos una relación tan profunda, pero que por ello mismo se convierten en objeto de análisis prioritario, debido a los nichos y oportunidades que todavía no hemos identificado, con especial referencia a los países con los que hemos firmado Tratados de Libre Comercio, a fin de conocer el grado de aprovechamiento que hemos realizado de los mismos y ver las posibilidades que hay de mejorar nuestra relación con ellos en el marco del trato preferencial que tenemos en el acceso a esos países.
En este contexto, hay que señalar que de 1986 a la fecha pasamos de ser una de las economías más cerradas del mundo a ser una economía abierta.
Esto ha originado grandes cambios en la estructura de nuestra exportación de tal manera que, actualmente, más del 83% de nuestras ventas está constituido por manufacturas, gran parte de ellas de alta tecnología.
Gracias a esta transformación, en la actualidad, México es la décimo quinta economía más importante del mundo; es el décimo segundo país exportador y también es el décimo segundo destino preferido de los flujos de Inversión Extranjera Directa a nivel internacional, situación verdaderamente emblemática generada por las enormes ventajas comparativas que tenemos y por la ventajas competitivas que hemos desarrollado, lo que nos ha convertido en un país estratégico y especializado en diversos sectores industriales como son el automotriz, el electrónico, el aeronáutico y el agroindustrial.
Hoy somos el primer país exportador de América Latina; y destaca el hecho de que somos el 7º productor y el 4º exportador más importante de vehículos ligeros a nivel mundial; también somos el 5º proveedor de productos aeronáuticos de Estados Unidos, y el 3er. exportador mundial de productos y servicios de Tecnología de la Información, entre otros.
Por esas ventajas, también destacamos en algunos bienes del sector agroindustrial en los que detentamos el 1er. lugar en exportación mundial de productos verdaderamente emblemáticos como son los casos de la cerveza y del aguacate, y no cabe duda de que gracias a estas ventajas, hay enormes posibilidades para México de escalar peldaños en materia de exportaciones, Inversión Extranjera Directa y transferencia de tecnología en otros sectores, tomando en cuenta también que el marco que brinda nuestro Congreso para promoverlos es inigualable.
Otro elemento que convierte al Congreso de Comercio Exterior Mexicano en un evento muy especial en esta ocasión, es que México está inmerso en un proceso de desarrollo sustentado en el proyecto de la 4ª Transformación.
Por eso, este Congreso se presenta como una oportunidad enorme para conocer y revisar lo mucho que se ha realizado en materia de comercio exterior, Inversión Extranjera Directa y transferencia de tecnología pero, mucho más importante, es conocer los elementos que se están incorporando en estas materias para acelerar el desarrollo económico del país, situación óptima que debemos aprovechar para hacer propuestas que incidan más positivamente en este proceso, tomando en cuenta la nueva filosofía, con el fin último de crear mayor número de empleos y riqueza.
Como en otras ocasiones, deseamos que de nuestro Congreso continúen saliendo importantes propuestas para la facilitación aduanera, la promoción de nuestras exportaciones en los distintos mercados, así como un canal de comunicación de las oportunidades que tiene nuestro país para la captación de inversión extranjera e internacionalización de nuestras empresas en el mundo.
Sin duda, nuestro Congreso será el centro para el encuentro de los diversos agentes involucrados en el Comercio Exterior y para hacer un análisis de sus problemas, pero mucho más importante, para hacer planteamientos que redunden en nuestra competitividad, en la reorientación de nuestro comercio exterior, en nuestra capacidad exportadora e importadora, y en la consolidación de México como un importante participante en el comercio internacional.
*Fuente: https://elsemanario.com/
Autor:Arnulfo R. Gómez
