Los recursos petroleros en México brindan enormes oportunidades para inversionistas, pero se deben monetizar lo más rápido posible los beneficios de la reforma energética y mejorar los términos fiscales para garantizar que lleguen las inversiones, coincidieron directivos de petroleras multinacionales.
Durante el Congreso Mexicano del Petróleo 2017, Tore Loseth, vicepresidente de Exploración en Norteamérica de Statoil, aseguró que la industria mexicana se debe mover con “un sentido de urgencia y acelerar los niveles de actividad”.
“México es un buen sitio para estar, tiene mucho petróleo, está ahí, pero el tiempo es esencial para que la economía aumente las expectativas de ganancias”, explicó.
Los datos muestran, detalló, que en tierra se pueden desarrollar activos con un potencial de 6 mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente (aceite y gas), y en costa afuera otros 20 o 30 mil millones de barriles.
Existen formas de incentivar la actividad, agregó Loseth, si bien es cierto que no todos los pozos que se perforan darán resultado, porque se requiere mucho tiempo para madurar un descubrimiento.
Erik Oswald, vicepresidente de Exploración en México de ExxonMobil, dijo que el país tiene muchas opciones, “pero debe mejorar su estructura de costos para ser competitivo frente a otras regiones petroleras del mundo que también buscan inversiones”.
Agregó que el gobierno deberá prestar atención al movimiento de precios y costos vigente en otras regiones y vincular la parte fiscal con los campos que habrán de explotarse en el Golfo de México.
recursos no convencionales como el aceite y gas shale ascienden a 50 dólares, mientras que en América Latina promedian 63 dólares.
Jack Jaminsky, director de Exploración de BP en México, dijo que los recursos petroleros nacionales abren enormes oportunidades, pero la innovación y la tecnología son elementos claves para desarrollar ese potencial.
Coincidió en que deben mejorar los términos fiscales e igualarlos a los que aplican en otros países, para “que sean comercialmente competitivos y poder garantizar que las inversiones vengan, sobre todo porque este país parece tener una cartera de oportunidades robusta y diversificada”. Sugirió que algunas de las tecnologías que se han utilizado en Estados Unidos podrían ser empleadas en México.
“Imagínense agregar 2% de producción en Cantarell”, ejemplificó. Liz Schwarze, directora general de Exploración en Asía-Pacífico de Chevron también se re◌rió a la necesidad de tener términos fiscales competitivos y equipararlos a las prácticas internacionales.
Los directivos de las petroleras coincidieron en que se debe tener paciencia porque los ciclos de exploración son prolongados y se requiere de siete a 10 años para obtener los primeros barriles de petróleo crudo en campos de aguas profundas.
No obstante, Oswald, de ExxonMobil, afirmó que si México logra mejores términos fiscales en los campos a desarrollar, “seguramente se pueden acelerar los tiempos”.
Los directivos coincidieron en la industria petrolera mexicana debe considerar estrategias como reducir los costos, moverse con un sentido de urgencia para obtener ganancias en el menor tiempo posible, utilizar tecnología empleada en otros países, sobre todo en Estados Unidos; y, ofrecer mejores precios y costos a inversionistas.
