Está prohibido por ley decidir trasladar los precios al consumidor de manera consensuada con el gremio, en lo particular eso se vale en el mercado”, comentó Alejandra Palacios.
Entre 2008 y 2010 los integrantes de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) implementaron el esquema denominado Cargo por Ajuste del Combustible (CPAC), hecho por el cual la entonces Comisión Federal de Competencia (CFC) multó al organismo así como a diversos transportistas.
La figura de ajuste por combustible en México se implementa por los proveedores del transporte ferroviario, principalmente Ferromex y KCSM que dominan el mercado, así como por el aéreo. En Estados Unidos las empresas de autotransporte de carga también aplican la medida bajo el esquema de fuel surcharge, donde incluso los mismos organismos de transportistas participan y apoyan a sus agremiados, como la calculadora de la Owner-Operator Independent Association (OOIDA) que aglutina al hombre-camión.
Aunque omitió comentar sobre el esquema que aplica el ferrocarril en México, Palacios Prieto explicó que el organismo que preside estará al pendiente si se dan acciones en donde haya prácticas que vayan en contra del libre mercado, “si no es una decisión personalísima y se ponen de acuerdo con los colegas, entonces se está manipulando al mercado”.
T21 ha reportado que diversos empresarios han compartido que iniciaron negociaciones con sus clientes para trasladar el incremento del diesel, dado que no pueden asumir un 16.5% de alza, que es la diferencia entre el precio promedio en enero 2017 frente a diciembre 2016.