FMI, EL SALVAVIDAS DE MÉXICO Y EL MUNDO

  Parcialmente fue cubierto el descenso de las reservas internacionales al 28 de agosto, tras la inyección que representó la asignación de Derechos Especiales de Giro (DEG) del Fondo Monetario Internacional (FMI) a Banco de México (Banxico).  Con la primera asignación de DEG crecieron en U$3,655 millones las reservas, que la semana pasada registraron un nivel de U$76,375 millones.  Así, la merma en lo que va del año se ubica en U$9,066 millones.  En esta misma semana, no obstante, continuaron presentándose las salidas de dólares para estabilizar al mercado cambiario y fondear al gobierno federal en moneda extranjera.  Toda vez que la activación de las subastas con y sin precio mínimo, disminuyó en U$500 millones, además de la venta de U$113 millones al gobierno federal.  El próximo 9 de septiembre se recibirá la segunda asignación por 224 millones de DEG, aproximadamente U$350 millones.  Estas asignaciones de DEG no están relacionadas con la línea de crédito flexible que se tiene contratada con el FMI por U$47,000 millones.   Cabe destacar que México no tendrá que desembolsar recursos por recibir estas asignaciones por parte del FMI.LIQUIDEZ PARA MÉXICO  Desde que en octubre del 2008, cuando se agudizó la crisis financiera, Banco de México ha asegurado el flujo de dólares en el mercado a través de distintos mecanismo: subastas con y sin precio mínimo, intervenciones directas a las instituciones financieras y subastas extraordinarias y derivado de esto ha echado mano, hasta ayer, de U$28,859 millones. LIQUIDEZ PARA EL MUNDO  El día de hoy, el Fondo Monetario Internacional (FMI) completó la inyección masiva de liquidez a sus miembros por el equivalente a U$250,000 millones. Y anuncia que antes del 9 de septiembre asignará otros U$33,000 millones más.  En un comunicado, refirió que la transferencia, de la que también México resultó beneficiado, se realizó en la moneda de operación al interior del Fondo, que son los Derechos Especiales de Giro (DEG´s).   Se trata de U$110,000 millones, que es 44% del total de los recursos se distribuyeron entre los países miembros clasificados como emergentes y en desarrollo, asignación que ingresó directamente a las reservas internacionales.  Al respecto, Alberto Ramos, economista de Goldman Sachs, aclaró que la gran ventaja que tendrá para México esta inyección de liquidez en Derechos Especiales de Giro (DEG´s), es que los bancos centrales pueden cambiar estos recursos en dólares, yenes y hasta euros, de requerirlo.   Explica que los bancos centrales pueden además vender sus DEGS a los otros bancos centrales.   No obstante, con esta asignación, que para el caso mexicano fue por el equivalente a U$3,800 millones, el banco central no puede intervenir en el mercado cambiario, según Ramos.Fuente: El Economista