México se mantuvo en 2017 en la posición 13 entre los mayores exportadores del mundo, informó la Organización Mundial de Comercio (OMC), en una clasificación en la que China, Estados Unidos y Alemania, retuvieron los tres primeros lugares, en orden descendiente respectivamente.
En cuanto a los mayores importadores, México perdió una posición, al pasar de la 12 a la 13, con Estados Unidos a la cabeza en ese indicador, seguido por China y Alemania.
Según los economistas de la OMC, se prevé que el comercio mundial de mercancías siga experimentando un fuerte crecimiento en 2018 y 2019, tras registrar en 2017 su mayor aumento en seis años. Pero la continuación de su expansión depende de que haya un sólido crecimiento económico mundial y de que los gobiernos apliquen políticas monetarias, fiscales y, sobre todo, comerciales adecuadas.
La OMC pronosticó un crecimiento del volumen del comercio de mercancías, medido por el promedio de las exportaciones y las importaciones, de 4.4% en 2018, cifra más o menos equiparable al incremento del 4.7% registrado en 2017.
Se estima que el crecimiento se reduzca a 4.0% en 2019, por debajo de la tasa media de 4.8% registrada desde 1990, pero aún muy por encima de la media posterior a la crisis, de 3.0%.
Sin embargo, consideró, hay señales de que quizás las crecientes tensiones comerciales estén ya afectando a la confianza de las empresas y las decisiones de inversión, lo que podría comprometer estas perspectivas.
De acuerdo con el organismo, es posible que el crecimiento del volumen del comercio de mercancías en 2017 se haya visto inflado por la debilidad del comercio durante los dos años anteriores, que estableció una base de referencia más baja para la expansión actual.
Hasta hace poco, los riesgos que podían afectar a la previsión parecían estar más equilibrados que en cualquier otro momento desde la crisis financiera. Sin embargo, teniendo en cuenta la reciente evolución de las políticas comerciales, las perspectivas de la OMC han de revisarse ahora a la baja.
“Si los encargados de la formulación de políticas tratan de hacer frente a las pérdidas de puestos de trabajo en sus respectivos países mediante la imposición de rigurosas restricciones a la importación, el comercio no puede contribuir a impulsar el crecimiento y puede incluso representar un lastre para la recuperación”, dijo Roberto Azevêdo, director general de la OMC.