Con más de 664 mil vagones de pasajeros y carga, la gigantesca empresa estatal de transporte Ferrocarriles Rusos transporta cerca de un millón 200 mil pasajeros y mil 200 millones de toneladas de carga al año. Algunos expertos señalan que es la columna vertebral de la Federación Rusa. Otros en cambios, hacen analogías con el sistema sanguíneo, que permite el transporte por el territorio. En palabras concretas, la empresa representa el 3,6% del Producto Interno Bruto de Rusia.
Aunque una nueva línea de alta velocidad redujo el viaje entreMoscú y San Petersburgo a sólo tres horas y media, los mayores cambios están por venir. El esfuerzo pretende catapultar las operaciones de la estatal con tecnología del siglo 21. Con la colaboración técnica de la gigante tecnológica IBM, se pretende una revisión de hardware, software y una reestructura de toda la arquitectura de comunicaciones de la compañía.
La renovación permitirá centralizar la gestión de datos en nuevos centros de cómputo, incluyendo la integración de programas computacionales automatizados como forma estratégica de rentabilidad. En 2014, el sistema de gestión será completamente nuevo.
Alexey Illarionov, es el principal gestor de la transformación. En esta senda, pretende dejar en el olvido lo que alguna vez fue Ferrocarriles Soviéticos, la antigua empresa de la URSS y que, posteriormente, se convirtió en Ferrocarriles Rusos.
El primer paso, reconoce Illarionov, es acabar con los dispersos centros de datos que están subdivididos en las 17 oficinas regionales y son algunos de los causantes de la lentitud que se apodera del servicio. Lo que se espera, es contar con tres grandes centros de datos, ubicados en San Petersburgo, Moscú y Ekaterimbirgo, en la frontera con Asia.
La gran meta, es a unificación de las aplicaciones de software en un solo entorno de datos. Aunque en el papel puede sonar sencillo, la escala del proyecto es realmente colosal.
En términos precisos, la red deberá, por ejemplo, calcular la nómina de un millón 200 mil empleados, realizar un seguimiento continuo de lugares, rutas y contenido de 624 a 900 vagones de carga y vigilar los 39 mil 700 vagones de pasajeros que cruzan Rusia.
A los problemas de envergadura, se suman otras condiciones. En la actualidad, cerca de 400 proyectos se desarrollan en el ámbito de software los que, eventualmente, deberán ser compatibles e interactuar con la plataforma de datos centralizada que implementará IBM. La lógica indica que escribir y depurar fragmentos de código toma tiempo y cuidado, por lo que la integración con otros códigos es exponencialmente más compleja, lo que convierte a este proyecto en un verdadero desafío para International Business Machines.
Por su parte, IBM pondrá sus mejores equipos en juego. Los nuevos centros de datos contarán con poderosos servidores, los IBM z10, introducidos en 2008, que cuentan con una potencia de cálculo de mil 500 servidores normales. Terabytes de información, bases de datos, registro de piezas de repuestos, locomotoras y sistemas de señalización son, en conjunto con labores de índole administrativa y comercial, parte de las tareas que deberá automatizar la empresa informática.
Sin errores
A toda costa, se busca evitar pasos en falsos. Por lo mismo, la nueva red se pondrá en marcha de manera gradual y durante un par de años. Durante este período, se traspasarán los datos para la gestión de movimiento de trenes de pasajeros, emisión de billetes y operaciones back-office, de los nodos regionales a los nuevos centros. Para fines de 2012, se espera que la mitad de las tareas informáticas hayan migrado, mientras que para el próximo año se espera el cierre de los antiguos centros de datos.
De manera simultánea, se desarrollan y escriben una serie de aplicaciones de software que deberán ser utilizados por alrededor de 150 mil empleados. Los actuales sistemas de gestión de tráfico, entrada de documentos digitales y sistemas de ventas para transporte de carga y pasajeros, en muchas ocasiones, datan de la década los ‘60. Por supuesto, el mundo de la computación ha cambiado enormemente y el nuevo sistema será “diseñado desde el principio para funcionar como un complejo software que abarcará toda la empresa”, señala Illarionov.
El enorme rastro de papel, la cantidad de errores y la lentitud en la disponibilidad de información, deberían ser eliminados en gran medida. En un par de años, se estima que se registrarán 120 millones de transacciones digitales por día, en las actividades globales de la empresa.
La importancia del ferrocarril en Rusia es primordial. Carbón, madera y minerales valiosos llegan desde todos los extremos del país en sus vagones. En una región donde el invierno azota con desmedida fuerza, los caminos se vuelven intransitables y el tráfico aéreo se restringe sólo a las principales urbes, el tren es una de las pocas opciones para recorrer los 17 millones de kilómetros cuadrados del país más grande del mundo.
Al operar la infraestructura disponible de manera más eficiente, se posibilitará una disminución de tarifas de carga y pasajeros, la disminución de costes y fomentaría el tráfico de Asia – Europa, aumentando la oferta de materias primas provenientes del extremo ruso oriental, como el níquel, cobalto, diamantes y carbón.