El gobierno federal estima que el producto interno bruto (PIB) de México crezca entre 1.5 y 2.5 por ciento; es decir, con una cifra puntual de 2 por ciento, impulsado por el consumo y una recuperación de la inversión, pero con riesgos, entre los que destacan problemas con la aprobación por parte de los poderes legislativos del acuerdo comercial con los socios de América del Norte.
Este crecimiento esperado del PIB resulta menor al estimado por la administración pasada, que consideraba un rango entre 2 y 3 por ciento, y una cifra puntual de 2.5 por ciento.
De acuerdo con el documento Criterios Generales de Política Económica que el secretario de Hacienda entregó al Congreso, la administración de Andrés Manuel López Obrador estima que el consumo siga creciendo, pero a un ritmo más moderado; no obstante, se anticipa una recuperación de la inversión, impulsada por la disipación de la incertidumbre asociada con la negociación exitosa del acuerdo comercial entre Estados Unidos de América, México y Canadá (T-MEC).
De manera consistente con el menor crecimiento esperado para la economía estadunidense, se estima un crecimiento de las exportaciones no petroleras de México menor al de 2018. No obstante, se prevé que las importaciones tengan una desaceleración aún mayor, por lo que las exportaciones netas tendrían una contribución positiva al crecimiento respecto a 2018.
Los mayores riesgos para el crecimiento se relacionan con: problemas con la aprobación del T-MEC en los congresos de cada país; un escalamiento de los conflictos comerciales a nivel mundial, que a su vez podrían afectar la productividad y el crecimiento global; un mayor endurecimiento de las condiciones financieras ante la normalización de la política monetaria de la Reserva Federal, que pudiera ser más acelerada de lo que se preveía o desordenada; y contagio de algunas tensiones geopolíticas en algunos países que pudieran causar una mayor reversión de los flujos de las economías emergentes a las avanzadas.
En materia de inflación, la previsión es la contemplada por el Banco de México, de 3.4 por ciento para el cierre de 2019, mientras que para el tipo de cambio al cierre de año se contempla una cotización de 20 pesos por dólar, ligeramente menor a la de 20.3 pesos por dólar esperado por los analistas del mercado.
Déficit en cuenta corriente será mayor
Para la tasa de interés, el gobierno estima que permanezca constante en el nivel esperado para el cierre de 2018 de 8.3 por ciento, que es igual a la esperada por el sector privado. En este escenario se estima que la cuenta corriente de la balanza de pagos registre en 2019 un déficit de 27 mil 300 millones de dólares, equivalente a 2.2 por ciento del PIB, cifra superior al 1.8 por ciento del PIB estimado para 2018.
Habrá coberturas petroleras
Para el precio del petróleo, se estima una cotización “conservadora” de 55 dólares por barril, pero están consideradas coberturas petroleras, aunque el secretario de Hacienda omitió dar detalles de éstas, se limitó a decir que “da mucha seguridad”.
