La operación, valuada en 27 mil millones de dólares recibió el visto bueno de los reguladores mexicanos, la Comisión Federal de Competencia Económica y el Instituto Federal de Telecomunicaciones.
El convenio de fusión incluye 2 mil 884 acciones de Canadian Pacific Railway y 90 dólares en efectivo para cada accionista. Además, esa empresa asumiría la deuda de aproximadamente 3 mil 800 millones de dólares de Kansas City Southern.
Solo restaría esperar las revisiones del regulador estadounidense, que en primera instancia validó el arranque de la operación en septiembre.
Como usted recordará, la fusión de CPR y KCS creará la primera red ferroviaria que conecta México con Estados Unidos y Canadá, lo que de paso mejorará las conexiones entre las rutas y provocará una disminución en los tiempos de traslado de los trenes.
Esto permitirá conectar las costas del Golfo de México con puertos en los océanos Atlántico y Pacífico, trasladando granos, automotores, productos del sector energético y químico y más.
En el documento que se ha enviado a los inversionistas para su toma de decisión, denominado ‘One railroad connecting the U.S., Mexico and Canada’, se señala, por cierto, que el acuerdo se alineará a la sustentabilidad que demanda el Acuerdo de París, para “mejorar la eficiencia del combustible y menores emisiones”.
Este dato resulta interesante, pues Canadá Pacific Railway ha estado trabajando en un proyecto de energía limpia para sus ferrocarriles, el Programa de Locomotoras de Hidrógeno de CP, busca desarrollar la primera locomotora de hidrógeno de transporte en línea de América del Norte
Moderniza una locomotora de transporte en línea con celdas de combustible de hidrógeno y tecnología de batería para impulsar los motores de tracción eléctrica de la locomotora, que por cierto el primer modelo se llama H2 0EL (hidrógeno – Locomotora de Cero Emisiones).
El Programa de Locomotoras de Hidrógeno tiene el potencial de reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero de las operaciones de locomotoras, apoyando los Compromisos de Cambio Climático de CP y la transición a un futuro bajo en carbono en el sector ferroviario de carga.
Estas son las locomotoras que veremos en un futuro mediato transitar en las vías de México, Estados Unidos y Canadá. Sin diésel o cualquier otro combustible fósil.
Un tema que debe importar en Guanajuato, donde estará el corazón y se integrará la exportación de los automóviles que irán a Estados Unidos y Canadá, desde el Centro de Distribución de KCS en Comonfort. Las piezas poco a poco se unen.
Fuente:
PeriodicoCorreo-https://periodicocorreo.com.mx/el-tren-norteamericano-de-energia-limpia/