La Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF) consideró que establecer un control de precios, a través de fijar tarifas máximas, como pretende la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SCT), con una directriz de emergencia que contiene información falsa e imprecisa, no es una solución a la situación económica por la que atraviesa el país con respecto a la inflación.
Además, reiteró que el ferrocarril tiene una participación muy limitada en el traslado de productos de la canasta básica (“siendo el autotransporte el medio hegemónico en esos productos”) y manifestó su desacuerdo con la afirmación de que el costo por el traslado de mercancías con de las concesionarias ferroviarias sea excesivo.
“El interés de normar de manera extraordinaria las tarifas ferroviarias, a fin de disminuir el impacto en la economía familiar, es una medida ineficiente y de poco impacto, para alcanzar el objetivo previsto en la justificación, en virtud de que el ferrocarril sólo representa el 26.4% del mercado de transporte terrestre y podría resultar contraproducente a largo plazo”, se argumentó.
En un comentario enviado a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer), el director de la AMF, Iker de Luisa Plazas, señaló que la directriz de emergencia (que se planea tenga vigencia de seis meses) también es violatoria por diversas razones de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como de la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario y de su Reglamento.
“En particular, debido a que la SICT no cuenta con facultades para establecer regulación tarifaría en los términos propuestos en, máxime cuando ni siquiera existe la condición de emergencia a que se hace referencia en el documento en comento… Tampoco existe un problema de seguridad nacional, como ligeramente se afirma”, se detalló.
El ejemplo de las tortillas
En la argumentación para implementar la directriz, la dependencia explicó que busca establecer un mecanismo normativo para fijar tarifas eficientes y equilibradas en los costos de transporte de mercancías a través de las vías férreas, y con ello, evitar “la arbitrariedad por parte de los concesionarios en la prestación de los servicios de transporte de carga y, con ello disminuir el impacto en las economías familiares del aumento de la inflación”.
Además, se refiere que la libre determinación de tarifas actual ha generado prácticas monopólicas hacia los usuarios del servicio público, como la discriminación de usuarios a través de impedir el acceso al servicio mediante tarifas excesivas o restricción de la oferta a usuarios pequeños por su volumen de carga.
Como un ejemplo se mencionó a la tortilla que, desde su punto de vista, es un peso más caro el kilo para la población debido a los elevados costos y restricciones en el servicio de transporte de maíz.
Al respecto, la AMF respondió: Lo cierto es que no existe una sola resolución de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), ni de sus predecesores, que haya establecido la existencia de prácticas monopólicas por parte de los concesionarios ferroviarios, por lo que la afirmación contenida en la directriz en este sentido es absolutamente falsa.
Sobre la tortilla, el comentario firmado por Iker de Luisa Plazas, manifiesta que el autotransporte de carga moviliza aproximadamente ocho veces más toneladas de maíz blanco, que el ferrocarril.
Fuente:
Alejandro de la Rosa-https://www.eleconomista.com.mx/empresas/AMF-tope-a-tarifas-ferroviarias-no-impactaria-inflacion-20220502-0015.html
