Washington, DC. Estados Unidos pretende subir aranceles a través de hacer más estrictas las reglas de origen, de acuerdo con su iniciativa de fijar el contenido por país para tener derecho a ventajas arancelarias.
En la práctica, si México no cumpliera con cierto nivel en las reglas de origen, debería pagar no el arancel cero que goza en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), sino el arancel de Nación Más Favorecida (NMF) de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Las reglas de origen son los criterios utilizados para determinar el lugar de elaboración de un producto, y son importantes para aplicar otras medidas de política comercial, entre ellas las preferencias comerciales, los cupos, las medidas antidumping y los derechos compensatorios.
El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, pidió que las reglas de origen se establezcan para cada país y no para la región en su conjunto, lo que ha sido la mayor sorpresa en la primera ronda de negociaciones que se lleva a cabo en esta ciudad.
Ildefonso Guajardo, secretario de Economía, replicó que no hay ningún acuerdo internacional entre países, bilateral, trilateral o plurilateral, que especifique las reglas de origen por país, porque sería como “ponerle una camisa de fuerza” a las cadenas productivas.
Robert Lighthizer, el representante comercial de la Casa Blanca, dijo que Estados Unidos buscará un mayor contenido de valor regional para automóviles y partes de automóviles, “y un sustancial contenido estadounidense” en un acuerdo modernizado.
“Si le sigues colgando pesos a esta situación, van a decir las armadoras, incluyendo las estadounidenses: ‘¿Sabes qué? prefiero mandarte mis autos de México a Estados Unidos por la vía de Nación Más Favorecida, pagándote 2.5% de arancel, que someterme a todas estas locuras que me estás pidiendo”.
Chrystia Freeland, ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, dejó claro que su país “no está a favor de contenido nacional específico en las normas de origen”.
El TLCAN eliminó todos los aranceles de Estados Unidos sobre las importaciones de automóviles de México y los aranceles mexicanos sobre los productos estadounidenses y canadienses, siempre y cuando cumplieran con las normas de origen de 62.5% para automóviles, camiones ligeros, motores y transmisiones; y de 60% para todos los demás vehículos y partes de automóviles.
Determinar el país de origen es bastante sencillo cuando un producto es “enteramente obtenido” o fabricado en un solo país. Sin embargo, cuando los componentes de un producto terminado se fabrican en muchos países, la determinación del origen puede ser un proceso complejo.
Los requisitos de las normas de origen difieren en cada acuerdo comercial porque son negociados individualmente entre las partes en el acuerdo. Para que los importadores puedan beneficiarse de un acuerdo comercial, deben demostrar que sus importaciones cumplen los respectivos criterios de las normas de origen.
“Si aparte de decirte que tiene que estar elaborado en América del Norte en tanto porcentaje, debe tener tanto por ciento de este país, haz de cuenta que les estás diciendo por decreto a las empresas cómo se integran y cómo se establecen”, cuestionó Guajardo.
El arancel NMF promedio de México es de 8.5%, mientras el de EU es de 3.1 por ciento.